Día 37

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Día n°2 desde mi despedida.

Querido Gabriel,

Quiero que sepas que...

Me encanta sentirme de esta manera.

Se siente tan bien poder ser feliz sin necesitarte para ello.

Intentaste hablarme.

Otra vez.

Estaba a punto de comenzar la clase cuando me di cuenta de que no había sacado el material.

Así que me di la vuelta para buscar mis cosas en la mochila que colgaba del respaldo de la silla.

Comencé a sacar de a poco las cosas y dejarlas sobre la mesa.

El libro.

La libreta.

Calculadora.

Y casi, casi que completé la acción terminando con el estuche.

Casi, casi.

Podría haberlo hecho sin interrupciones.

Pero no existe eso contigo presente.

"Hola Gabriela" Sonreíste cálidamente como solía encantarme.

Pero...

No causó mariposas en mi estómago.

Simplemente te ignoré.

O eso me hubiera gustado.

No te hablé, pero tampoco te ignoré al 100%.

Levanté mi cabeza en un pequeño movimiento en forma de saludo y sonreí.

Nada más que eso.

En el resto del día volviste a intentar hablarme.

Te ignoraba siempre que podía.

Excepto cuando me volví a dar la vuelta para guardar la libreta y demás.

Me miraste durante un segundo.

"¡Hey! Hola Gabri"

"Hola Gabriel" Respondí sin ganas.

"¿Cuánto tiempo, no?"

No respondí, me di la vuelta y ahí te dejé.

Quiero que sepas que...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora