Quiero que sepas que...

Día 5

Querido Gabri,

Quiero que sepas que...

Cada día te siento más lejos de mi, y no es por decir, sino porque lo estás.

Solías sentarte junto a mi en una de las últimas filas de la clase, y ahora te sientas allí a kilómetros de distancia, en una de las primeras filas junto con Sandra, esa chica tan mona y callada, sutil y dulce. Todo lo contrario a mi, que suelen compararme con un chico, mi voz retumba por donde sea que me encuentre hablando, soy muy cantosa al reírme y sobretodo bruta. En especial contigo.

Pero no todos somos perfectos... Excepto ella, Sandra con esa cara libre de pecas y tan perfecta, su sonrisa adornada con una hermosa hilera de perfectas perlas alineadas, su forma de ser tan especial, un cuerpo con unas curvas que matan a cualquier chico y de celos al resto de chicas.

Ella es la perfección en grande, y tú lo notaste porque vi cómo le hacías "ojitos", cómo le hablas, cómo te le acercabas, ¿de verdad yo me comportaba así a tu lado?