Cap.7 Enfrentamiento

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* MELIODAS POV *

Me acerqué a su cuello y olí su cabello, sus brazos se sentían tan cálidos que me sentía a gusto en ese lugar ...

— S .. señor Meliodas —Elizabeth me habló, reaccioné, era como si estuviera en un tipo de trance.

— ¿Mmm? —pregunté, tomando un mechón de su cabello y oliéndolo, pude oír su jadeo de sorpresa.

— ¿No cree ... que deberíamos separarnos ya? —fruncí el ceño ... y con desgana me separé de ella ...

'' ¿Qué diablos me pasa? ''

Cuando nos separamos pude ver cómo ella se agarraba el cuello con una mueca de dolor.

— ¿Te encuentras bien? —pregunté, ella me miró y rápidamente su mueca de dolor desapareció, fruncí el ceño.

— No, no no, estoy bien, no se preocupe ... —se puso de pie y se dirigió hasta su habitación, miré atentamente cómo se dirigía hacia allá, podía ver cómo se le dificultaba, me acerqué a ella, la tomé y puse su brazo por detrás de mi cabeza...

— Déjame ayudarte ... estás agotada ... —le dije suavemente, ella me miró y con disgusto asintió ¿Por qué a la gente que le gusta ayudar, no le gusta ser ayudado?

La dejé en su cama y le llevé el botiquín de primeros auxilios ...

— Creo que si mañana las heridas están bien, podré quitar las suturas ... —dijo algo feliz mientras limpiaba la herida por ella misma, lo miré y fruncí el celo con molestia...

— déjame hacerlo por ti.... —le dije mientras le quitaba el algodón con alcohol y me agachaba un poco, hasta la altura de su cuello... Pero cuando lo iba a hacer mi mano tembló un poco... Me examiné a mismo y vi que estaba nervioso...

" ¿Por que estaría nervioso?... Ella solo es... Alguien muy amable... y bonita"

Me quité esos pensamientos de mi cabeza y proseguí a limpiarle la herida, pasaba el algodón lentamente por encima de su piel. Le presté toda mi atención a esos movimientos, viendo como su piel quedaba ligeramente brillante por el alcohol, mi respiración se aceleró...podía sentir la tensión que había entre nosotros.

Cuando le presté atención a Elizabeth, vi que ella estaba en la misma situación y sus ojos estaban cerrados con fuerza, sus labios estaban apretados...

Me apresuré a limpiar la herida y terminé en menos de 1 minuto.

— Creo que terminé... -le dije, ella abrió sus ojos y examinó la herida.

— Oye... lo hiciste muy bien ¿Cómo?

— Eh, leo mucho tus libros de medicina.

— ¿En serio? Eso es bueno, gracias.. —dijo con calma mientras ponía buena banditas sobre las marcas de colmillos, me levanté y me acerqué a la puerta.

— Te dejaré dormir, buenas noches Elizabeth —Ella me sonrió.

— Buenas noches señor Meliodas... —esa sonrisa marcó un camino en mi mente que no se borraría, al cerrar la puerta se me escapó un pequeño sonrojo. Reaccioné y de inmediato revolví mi cabeza...

" No sé que estás pesando Meliodas pero, olvídate de ella.. ¿Quién sabe si la volverás a ver cuando todo esto termine?"

Pensé al entrar a mi habitación y cambiar mi ropa a una pijama, me tiré en aquella cama y traté de dormir...

******

No pude dormir durante toda la noche.

Los vampiros son nocturnos pero a veces no seguimos esa rutina y dormimos a cualquier hora, no importa si es de noche o no. Por lo cual no tengo esa obligación de dormir en el día...

Esclavo peligroso MELIZABETHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora