AMNESIA. (COMPLETA): SAGA ATRACCIONES PELIGROSAS

Parte 60

HOLA MIS QUERIDOS LECTORES, MUCHO TIEMPO SIN PODER TENER ALGO Y ME DISCULPO, LA VERDAD ME HABIA QUEDADO ESTANCADA CON LA NOVELA, POR LO QUE DECIDI...

MEJOR LEANLO USTEDES MISMO Y DIGANME QUE OPINAN ;)

LOS AMO

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Las horas a pasado muy rápido, la comida con Zury fue muy agradable, a pesar de haber perdido parte de su memoria, sus gustos no parecen haber cambiado, me comento que de un momento a otro comenzó a escribir, que sentía como si siempre lo hubiera hecho. Lastima que no he podido llevarla aun a su apartamento y no creo que deba volver. Estoy agotado, las horas restantes en la oficina fueron extenuantes, entre cliente y cliente todo se volvió mas pesado. Ahora estoy sentado en mi silla, recostado al punto que parece que la silla sedera y caeré de espaldas.

-Ismael, puedo pasar-

-Claro Ana- me incorporo al escuchar como cierra la puerta tras ella – Que ocurre- su rostro esta pálido, se ve desganada, no parecía, en toda la tarde estaba igual a mi parecer, pero ahora que la veo con detenimiento-

-Solo quiero decirte algo...-

-Adelante-

-Alejate de esa mujer, es peligrosa-

-¿Cómo dices?-

-No puedo darte detalles, pero lo mejor es que lo dejes, que la alejes de ti-

-No entiendo Ana-

-Es solo que...- juega con sus manos, se ve temerosa, como un pequeño ratón dentro de una ratonera.

-Mira Ana, no puedo alejar a Zury, sufrió un accidente y a perdido su memoria, además de que es uno de mis clientes-

-Creo que la tratas mas que solo un cliente-

-¿Estas celosa?- suelta un bufido.

-No es eso, ella no es lo que parece, no es como tu piensas-

-No entiendo-

-Es solo que es difícil, no puedo decirte más.-

-Entonces por que vienes y me "adviertes" si no puedes decirme por qué-

-No es tan sencillo, si te digo yo también...-

-Tú también qué Ana. Esto no me gusta, cada vez es mas confuso, en un momento estas aquí a mi lado, animándome, dándome esperanzas- no se en que momento llegue a estar tan cerca de ella- y en otro estas tan distante, indiferente, recelosa- tomo sus brazos- no puedo seguir así, no me dejas continuar, tu simple presencia me abruma, me confunde cada día, deseo tenerte con...- su labios sellas mis palabras y no dudo en responder.

Sus brazos rodean mi cuello intentando que la distancia entre nosotros sea lo mínimo posible. Se que este arrebató es para que no continue interrogandola, pero no puedo evitarlo, la deseo y se que muy dentro de mi la he llegado a amar, a pesar de sus desplantes, sus intentos de alejarme y su indiferencia. Continuamos besándonos, cada movimiento sutil de nuestros labios es una batalla por mas, la arremeto contra la puerta y ella suelta un leve grito.

-Te lastime, lo lamento- digo jadeando por la falta de aire y la excitación.

-No. Es solo que me sorprendió- un pequeña sonrisa aparece en sus labios.

-¡Ana!- relamo mis labios

-¿Ismael?- ella me mira

-Quiero esto, lo deseo, pero...-

-No digas mas- ella coloca sus manos sobre mi pecho- debo irme-

-Vas de nuevo a ese horrible lugar-