⌗ INJE ♡̷̷%՞˖

#O1O

Minghao no podía creer lo que acababa de escuchar. Tenía muchísimas preguntas en su cabeza.

—Pero... ¿Los retratos por qué son? ¿Qué es esa fuerza mayor? ¿De qué murieron Wonwoo y Joshua? ¿Y Vernon y Seungkwan? ¿Y por qué tú y Kyulkyung también moristeis mediante el ritual? ¿Y por qué los demás también? ¿Y por qué no pasáis al mundo de los muertos? ¿Y qué pasó en realidad con Seokmin? ¿Y qué pasa si te quitas eso de la cabeza?

—Cállate ya, hostia.—El chico paró con sus preguntas.—Algunas son cosas que deberías saber y otras son cosas que se deben quedar en el olvido.

El oculto se levantó de donde estaba y se estiró a un lado y hacia otro, como si fuese a hacer deporte.

—Venga, hasta luegoooo.

Y desapareció de allí. Minghao se quedó perplejo. Sentía que su vida ya no tenía explicación después de todo lo que acababa de oír, quería ir a contárselo a Jun y que le dijese que lo había imaginado todo, y así lo hizo, aunque en el fondo sabía que todo había sido muy real. Pero antes de irse cogió su bolsa de piedras que había dejado en el suelo.

Volvió dentro de la casa y buscó a su hermano por todos los sitios pero no lo encontró, ni siquiera vio a ningún oculto.

Pasó el resto del día solo, pensaba que se habían ido o algo así, ya que no entendía porque nadie estaba en la casa.

Se hizo de noche y nadie había aparecido aún. Decidió irse a dormir como cualquier otro día, aunque se sentía mucho más inseguro de que costumbre y, aunque estuviese solo, sentía una presencia más en la casa, pero pensaba que solo eran imaginaciones suyas.

Subió a su habitación, se tumbó encima de la cama y empezó a cerrar los ojos lentamente, estaba muy cansado.

Al cabo de un rato dormido, una voz lo despertó.

"Taka stökk til hærri jörð".

Un escalofrío le recorrió todo el cuerpo y lo único que quiso es que todo fuese una alucinación por el cansancio.

La voz cada vez se hacia más extraña, como si estuviera distorsionada. Decidió seguirla para ver de dónde venía.
Salió de su habitación y siguió la voz. Se frenó al llegar a las escaleras que llevaban al ático.

La voz se oía más fuerte desde ahí. Fue a subir el primer escalón cuando una sombra pasó corriendo detrás de él.
Minghao bajó su pie y miró hacia ambos lados. Todo estaba demasiado oscuro, tanto que hasta se le hacia raro.
No dejaba de preguntarse dónde estaban los demás, porqué no oían la voz también y quién era esa sombra que pasó corriendo.
Decidió olvidarlo y subir arriba. Fue a hacer lo mismo cuando pasó otra vez la sombra, esta vez parándose detrás mientras le susurraba al oído:

—"Deberías estar durmiendo".

Minghao notaba como su pulso se aceleraba mientras miraba a todos lados, mareado, buscando de dónde provenía esa voz aguda y ronca. No encontró a nadie.
Volvió a su habitación e intentó dormir, como le había dicho esa "cosa".

Pasó un rato y el chico seguía sin poder dormir. Se giró en su cama dándole la espalda a la puerta, entonces escuchó como esta se abría.

—¿Jun?...¿Eres tú? —Preguntó girándose para mirar al recién llegado.

—Jun...no está...aquí.