pulpo

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Taihei se sintió expuesto cuando de su boca salió el nombre de aquella chica en vez de decir "Ebina-chan" ya que así es como el la llamaba. Umaru no perdió la oportunidad para aprovecharse de la metida de pata que había hecho su hermano.

-Hooo.. Así que la razón por la que vas tarde es porque estabas con Ebina-chan hee? -

Taihei se tranquilizó todavía podía arreglar su error.

-Sí, ella se había desmayado y pues la lleve a su apartamento para llamar a la escuela y que descansará -

Umaru hizo una expresión que hizo estremecer a Taihei, conocía esa expresion que hacia su hermana cuando todo salía como ella quería.

-...Me pregunto porque se habra desmayado Ebina-chan, extrañamente ella solo le pasa cuando esta contigo asi que puedo suponer que estaban juntos, ¿Verdad? -

Lo tenía, había caido en la telaraña de Umaru, no le quedaba mas que usar su autoridad para salir de esa.

-!Eso es algo que hablaremos después, tu te vaz a la escuela¡-

Umaru se rio a carcajadas, nunca penso que cuando su hermano estuviera enamorado sería tan divertido. La chica giro sobre sus talones alegre, pero la felicidad se convirtió en incomodidad cuando vio salir a Shylpy de su casa.

-Buenos dias Oni-san!! -

Dijo la peliazul con su característico humor, pero no hubo saludo para su compañera. Umaru suspiro pero opto por seguirla posicionándose a un lado de ella, Shylpy la miro de reojo, pero no dijo nada.

Taihei miro esa escena con suma sorpresa, pero sabía que algo así iba a pasar tarde o temprano con su hermana, pues sería raro que pudiera esconder su secreto por siempre. Anteriormente estaría preocupado, pero sabía que Shylpy era una buena chica y que realmente queria a Umaru, así que decidió confiar en las palabras que Ebina le dijo algunas horas antes.

-C..C..Confía en ella, Umaru-chan ya no es una niña, ella se preocupa realmente por nosotras-

Sonrió como idiota al recordar el rostro de la chica, pero su felicidad desapareció cuando recordó que iba tarde al trabajo.

---------------En la oficina------------

Contaba con mas de la mitad de su trabajo terminado cuándo todavía le quedaban seis horas de trabajo. sí, hoy podría salir temprano como había planeado. Había una promoción en el mini super de su casa, pero como no era de 24 horas, este cerraba a las 10:30, aunque esto no era ningun problema para el joven Doma, que con su rápida y organizada forma de trabajar, tendría todo listo para las nueve y cacho. Perfecto para sorprender a Umaru.

Ya en el mini super Taihei pudo distinguir una oferta en el pulpo increíble, «Lo están regalando» exclamó al darse cuenta que el precio era realmente bajo. Era bueno que el pulpo estuviera en promoción, pero había tanta gente, que sería suerte llegar a agarrar uno.

Taihei se resigno del pulpo, porque sería incapaz de poder luchar contra todas las señoras que se peleaban cómo si sus vidas dependían de ello. Suspiro desganado para seguir con sus compras, pero a no muchos metros enfrente de el se encontraba cierta chica que estremecía su corazón.

Penso en hablarle, pero se detuvo al ver la mirada intensa de la joven, pudo ver que observaba la oferta del pulpo y que se acercaba temerosa. Tal acción impresionó a Taihei que sabía que Ebina no tendría oportunidad con aquellas amas de casa.

-D.. D.. Disculpen -

Tocaba los hombros de las señoras para que le prestaran atención, pero sin optener resultados, Taihei se conmovió e intento agarrar un pulpo también.

La escena de dos jovenes enamorados intentando comprar un pulpo en promoción no era una escena que se pudiera catalogar como romántica, pero para Ebina que el chico que ama se acercara a ella todo desarreglado, agitado y con un pequeño pulpo en mano fue realmente hermoso.

-Es algo pequeño, pero es lo que alcance. Ay, me duele mucho las costillas, creí que iba a morir. -

La chica vió aquella escena conmovida y con ternura, antes de darse cuenta ya estaba riendose.

-¿Ebina-chan? -

El ver a la tímida chica riendo tan abiertamente a su lado hizo que valiera la pena el pelear por ese pulpo. Sintió ese aire de confianza entre ambos y soltó lo que desde la mañana quiso hacer.

-Ebina-chan, puedo decirte por tu nombre? -

Despues de decirlo se dió cuenta de lo raro que sono. Iba a retractarse, pero Ebina le contesto mientras se tapaba la cara con el pulpo por la vergüenza.

-C.. C.. Claro! -

Taihei sonrió y bajo el pulpo para ver el rostro de su enamorada.

-Tu también puedes llamarme por el mío-

El rostro de Ebina estaba mas rojo que el de una Tsundere al confesarse, no podía creer lo que escuchaba.

-N.. no puedo, Oni-san es O.. Oni-san-

El chico se deprimió un poco al pensar que ella no podría llamarlo por su nombre, pero no se rindió.

-¿y si me llamas por mi nombre cuando estemos solos únicamente? -

Ebina iba a negarse, pero las palabras de Kirie seguían retumbando en su mente, esta vez realmente se iba a esforzar en su amor, asi cuando sea rechazada sabría que hizo su mayor esfuerzo.

-Bueno, si estamos...S..Solos si-

La chica se inclino en señal de agradecimiento por el pulpo y salio corriendo directo a su casa. Taihei estiro el brazo para detenerla, pero no la alcanzo. Al igual que Ebina, el no se iba a detener hasta que su amor llegara a la otra persona.

Los sentimientos de ambos (TaiheixEbina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora