Rutina (HTR)

Tío favorito

Si le preguntabas a Mei quien era su tío favorito ella tardaría varios minutos en responder.

Primero estaba Saru-chan. Amaba a Saru-chan por lo divertido que era, le gustaba pasar tiempo con Saru-chan, más cuando Nao-chan iban con ellos a comprar helado en el parque. Le gustaba como Nao-chan molestaba a Saru-chan, le recordaba a sus papás. Eso significa que ellos se amaban ¿cierto?

Luego estaban sus tíos Enokida y Saito. Su tío Enokida le enseñaba a hackear (a escondidas de sus padres) y era muy divertido todo lo que se podía hacer con lo que su tío le enseñaba, un par de veces había utilizado lo que su tío le enseñaba para salir de una clase aburrida antes de tiempo. Su tío Saito también era divertido, a veces la llevaba al parque para que jugaran o a alguna feria y le compraba todo lo que ella quería.

No podía olvidar a su tío Jiro y Misaki-chan. Era divertido jugar con Misaki, ella solía ayudarla en sus tareas de la escuela mientras pasaban tiempo en el bar de Jiro, Jiro era un padre cariñoso con Misaki y preparaba dulces deliciosos. Su tío Martínez bien era divertido, él le había enseñado a hablar un poco de español. A sus 7 años la pequeña Mei ya hablaba japonés, ingles, chino y español fluidos además de tener un futuro como hacker gracias a sus tíos.

Pero no podía olvidar las clases de autodefensa, como tomar cosas sin que nadie lo note, eliminación de evidencias y biología de sus tíos Genzo, Yamato, Saeki y Shigematsu respectivamente.

- Agradecería que dejaran de enseñarle a mi hija cosas para que se convierta en una criminal - gruñó Lin un día en uno de los entrenamientos del equipo.

- Sabes que tarde o temprano ella descubrirá que ustedes son asesinos ¿verdad? - cuestiono Enokida.

- Prefiero que sea más tarde que temprano.

- Lin-kun - llamo Jiro - aunque comparto tu opinión acerca de mantener a Mei-chan lejos de este mundo debes tener en cuenta que ella nunca tendrá una vida normal con padres como ustedes... Lo mejor que pueden hacer es enseñarle a protegerse.

- Eso lo sé - suspiro Lin - pero una cosa es enseñarle a que se protege a si misma... Otra es involucrara en nuestro mundo.

- ¿Nos prohibiras enseñarle cosas como defensa personal y esas cosas? - pregunto Martínez.

- No... Pero no sé atrevan a enseñarle nada más que eso.

Él sabía lo duro que podía ser entrenar para convertirse en un asesino profesional, no quería que su hija pasara por lo mismo. Al menos eso pensaba mientras veía como su pequeña hija y Misaki jugaban en los asientos de los fanáticos en el estadio... No quería que Mei tuviera esa vida.

Continuará...