Black Or White || E.D.T. 2 (Suspendida Hasta Nuevo Aviso)

23. En Proceso de Amistad

Abro los ojos tallándolos un poco y suspiro. Con cuidado de no despertarlo me levanto de la cama. Me quito la pijama y cuando voy a empezar a vestirme siento sus brazos alrededor de mi cintura, lo que provoca un pequeño salto de mi parte.

- Taylor, me asustaste.- digo sin voltear a verlo sintiendo como sus manos se posan en mis caderas, dejando leves caricias.

- Ellie...- dice con voz ronca en mi oído que me provoca un pequeño escalofrío.

Me giro a verlo y mis manos van a su cabello, acomodandolo un poco.

- ¿Hace cuánto no te cortas el cabello?- pregunto divertida pero hace caso omiso a mi pregunta.

Empieza a besar mi cuello sin que yo lo prevenga y resisto soltar un jadeo.

- Taylor...

- ¿Mhm?- dice sin dejar de dar besos sobre mi piel y suspiro.

- Tengo que ir...

- Había olvidado lo sexy que eres en ropa interior.

Oh Dios.

Siento como mis mejillas toman un color parecido al de un tomate y ríe.

- Tay...

- Déjame disfrutar un rato.

¿Dónde está el chico que he visto todos estos días?

Deja de lado mis clavículas y comienza a atacar mis labios con tanta pasión que me contagia. Sus manos van directamente a mi trasero y río, mordiendo su labio inferior. Me levanta y rodeo mis piernas en su cintura, pasando mis brazos detrás de su cuello. Nos deja caer en la cama, él encima mío. Mis manos empiezan a jugar con su cabello y sus manos recorren cada parte de mi piel desnuda.

- Ellie...

- Taylor...- suelto en un jadeo y sonríe.

- Eres deliciosa.

No me deja decir nada cuando su boca va a mi hombro derecho, dejando pequeñas mordidas que sólo me hacen arquear el cuerpo hacia él.

Sobre todo a su entrepierna.

Suelta un gruñido en mi cuello y succiona la piel de mi hombro, haciéndome abrir los ojos de golpe.

- Taylor.- regaño estando apunto del colapso y ríe.

Lame la piel succionada y sé que eso dejará una marca.

Afortunadamente no está tan arriba como para ser visible al ponerme una camiseta.

Nota mental: no usar camisetas de tirantes

Se levanta de encima mío y se acuesta a mi lado. Lo abrazo apoyando mi cabeza en su pecho y siento los rápidos latidos de su corazón.

- Sólo porque estamos en la casa de mi tía y porque tienes que irte no te hago mía.

Siento mis mejillas más calientes de lo que ya estaban y río nerviosa, negando con la cabeza.

- Taylor...vas demasiado rápido.- digo divertida mirándolo a los ojos y suspira.

- Lo sé...lo siento.

Dejo un corto beso en sus labios y me levanto de la cama, colocándome el pantalón blanco.

- ¿Por qué tienes que irte tan temprano?- dice haciendo un puchero y río.

- Ya te lo expliqué anoche.

Suelta un gruñido y se cruza de brazos de forma infantil.

- No le veo fallas a esa lógica.