Capítulo 9.

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Narra Caleb Stonewall:

-Buenos días- dije girándome a mirar a quien dormía a mi lado.
-Buenos días. Oye... En cuanto a lo de ayer- le interrumpí.
-Si quieres podemos olvidarlo. No sé por qué lo hice. Perdón, quiero decir...- Me besó.
-Te quiero Caleb.
-Y yo. Pero, ¿ahora qué?
-En cuanto a eso... no creo que sea lo mejor que se entere nadie más.
-Está bien.

Lo entendí, suponía que el equipo no estaba preparado para algo así. Ese día teníamos entrenamiento así que decidimos actuar como de costumbre. Yo como un capullo, por supuesto.

Narra Mark Evans:

Yo nunca había sido alguien que se retuviera sus sentimientos. Sí era cierto que Axel me gustaba, pero no podía arruinar la estabilidad del equipo así que decidí no decir nada.

En el comedor me senté en la misma mesa que él, también estaban Nathan y Jude.

-Ey Jude, ¿qué pasa? Parece que buscas a alguien.
-¿Eh? No, no es nada Mark no te preocupes.- dijo con una sonrisa.

Axel me miró y sonrió. Yo rojo miré de nuevo a mi plato y seguí comiendo.

Narrador externo:

Al día siguiente un equipo llamado Neo Japón se dispuso a enfrentarse al Inazuma Japón. Neo estaba compuesto por antiguos rivales del Raimon, quienes habían entrenado para conseguir, o intentar, aplastarlos. El partido comenzó con Dvalin y sus compañeros atacando muy fuerte, lo que hizo que los compañeros de Mark se cansasen bastante rápido. Caleb desde el banquillo miraba preocupado a Jude, quien estaba jugando en el campo.

A mitad del partido hizo 2 cambios: Scotty por Darren y Jordan por Archer. Caleb se quedó frustrado en el banquillo.

Caleb: "Bueno, al menos las vistas son buenas", pensó.

Al día siguiente Sue, con aires de Cupido, engañó a Camellia para tener citas forzadas con Mark, aunque éste no sentía nada por ella, ya que su corazón pertenecía a Axel Blaze. Por otra parte Jude y Caleb, después de entrenar, se fueron a dar un paseo, a modo de cita.

Narra Jude Sharp:

-¡Ey mira ese peluche!- dije mirando un puesto del parque de atracciones.
-¿En serio? Y luego te quejas de mí por tener un osito.
-Pero es perfecto, míralo.
-Yo también soy perfecto, y como lo soy te lo voy a comprar. Deme el del pingüino por favor. Toma.- Me sonrió.
-¡Gracias! Mira qué monada por favor- le saqué una foto y se la enseñé- de verdad míralo es precioso. Es una monada- repetí.
-Mira qué monada- dijo Stonewall enseñándome su móvil. Al mirarlo vi que era la cámara frontal. Me giré a mirarlo- Eres- me cogió de la barbilla y me besó- Eres idiota.
-Soy tu idiota.- me volvió a besar.

Narra Caleb Stonewall:

Después de la tarde en el parque de atracciones fuimos a ver el atardecer en un puente perdido de la mano de Dios. El cielo era muy bonito, aunque bueno, no tanto como sus ojos.

-¡Eh chicos! ¿Por qué no estáis en la concentración? Cenaremos en nada- dijo Mark a nuestras espaldas. Me levanté de un salto y me alejé de Jude. No podía permitir que nadie supiera lo nuestro- oh, perdón ¿interrumpo algo?
-No, tranquilo, solo hablábamos de una super técnica. Ahora iremos- dije sonriendo.
-¡Vale! Nos vemos chicos.- Mark se fue.

-Perdón por quitarme así de brusco...- dije. Jude parecía enfadado. - Luego te lo compenso si quieres.
-Vámonos a cenar.

Jude no habló en todo el camino. "Joder la he cagado. ¿No puedo dejar de cagarla siempre?". Al llegar me senté solo, como siempre, pero no podía dejar de mirar a Sharp. ¿Qué podía hacer para que me perdonara?

Después de la cena fui a su cuarto.

-Jude, ábreme por favor.- abrió la puerta. No me habló, símplemente se tumbó en silencio en su cama. Yo me tumbé al lado.
-¿Qué soy para ti?- su voz parecía triste.
-¿Qué eres para mí? Pues no sé explicarlo bien con palabras, pero ¿sabes la sensación de que todo el mundo se te cae encima hasta que le das a un balón y todo deja de importar? Como si solo estuviérais el balón y tú, pues eres mejor que esa sensación. Contigo no me importa qué hora sea, ni cuánto hayamos estado tumbados haciendo nada, solo me importa estar contigo y poder besarte, abrazarte y cuidarte.
-¿Entonces por qué no lo puede saber nadie? Sé que fui yo el que te lo dijo, pero ahora que me doy cuenta de lo que significa no poder mostrarlo me arrepiento.
-Jude, si dejáramos que lo supiera el resto de gente no nos tratarían con normalidad. Estoy seguro. Solo aguanta hasta... no sé, después del TFI.
-Está bien. Pero un último favor- me dijo con los ojos llorosos- quédate esta noche conmigo. Tengo miedo de perderte.- después se abrazó a mí y sentí cómo poco a poco se dormía en mi pecho.

El amor el amor el amor.

Pequeño idiota. (Jude×Caleb)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora