Es imposible que Sana supere a Nayeon. La mayor lleva tanto tiempo jugando a ese estúpido juego que ha batido todos los récords, se sabe todos los trucos y no hay manera de que nadie le plante cara. Sin embargo, Sana se siente con especial ánimo esta mañana, por lo que decide probar suerte a pesar de no ser una experta en videoconsolas.
Sus dedos se mueven con agilidad. Su mirada, centrada y al frente, refleja una concentración absoluta; sabe que cualquier error supondrá una nueva victoria para Nayeon, y eso no puede ocurrir de ninguna de las maneras, sabiendo que eso significaría tener que soportar su fanfarronería durante el resto del día (y probablemente, de los próximos siguientes).
─No vas a conseguirlo... ─presume la mayor con una sonrisa mientras ve cómo el cronómetro de su compañera va ligeramente por detrás que el suyo.
Pero Sana no aparta la mirada de la pantalla y no deja que las palabras de su compañera le afecten. No va a perder. No va a quedar por detrás de ninguna manera.
─¿Cómo habéis dicho que se llama este juego? ─pregunta con desinterés Jihyo, que lleva media hora presenciando el pique entre la coreana y la japonesa.
─Crash Bandicoot. ¿Te lo tendré que repetir más veces? ─responde Nayeon sin dejar de mirar el televisor.
─Yo es que de estas cosas no entiendo. ─La líder se reincorpora un poco, sin muchas ganas─. ¿Y cuál es el objetivo?
─Correr y saltar obstáculos ─explica, justo cuando Sana se golpea contra un barril que caía ladera abajo, hecho que hace saltar a la mayor y dar una palmada de entusiasmo─. ¿Ves, Thomas? ¡Esto es lo que hay que evitar!
A Sana le dan ganas de coger ese barril y tirárselo en la cabeza.
─No le veo la gracia ─responde la líder con desinterés─. Y no me llames Thomas.
─¡Se intentará!
Nayeon es así, piensa Sana. Un ser que esporádicamente desprende irritabilidad por los poros. Aunque ahora solo puede pensar en lo complicado que va a ser superar su tiempo. Este estúpido barril puede que le cueste la victoria; u obra un milagro o le espera un día lleno de arrogancia nayeoneril.
Minatozaki Sana, tú puedes. Has estado practicando estos últimos días y sabes que ya estás a su nivel. Demuéstraselo.
─¡Chicas! ─se oye gritar a Jeongyeon desde la planta inferior de la suite─. ¿Habéis visto mi moneda de la suerte?
Jihyo sonríe. Desde siempre, Jeongyeon colecciona objetos extraños que se va encontrando, y últimamente no se separaba de esa curiosa moneda.
Las chicas gritan un "No" al unísono.
Desde la planta baja, la segunda mayor del grupo empieza a desesperarse. Estaba segura de que ayer por la noche había dejado la moneda sobre el mostrador de la entrada, pero esta mañana no hay rastro de ella. Jeongyeon quiere mucho a sus compañeras, sí, pero aborrece que toquen sus cosas sin permiso. Con algo más de frustración, grita:
─¿¡Me ayudáis a buscarla?!
Transcurren unos segundos sin recibir respuesta hasta que escucha un "¡MIERDA!" proveniente de la planta de arriba, seguido de un montón de aplausos y alaridos de alegría, que pertenecen sin duda a Nayeon.
─¡Perdedora! ─escucha alardear a la mayor─. ¿Qué te creías?
A Jeongyeon le da igual qué demonios está ocurriendo arriba, solo quiere que su moneda aparezca. Entonces, ve a Jihyo bajando las escaleras y dirigirse hacia ella.
─Las niñas están discutiendo sobre quien es mejor jugando a las maquinitas. Y ha ganado la de siempre.
'Vaya día nos espera', piensa Jeongyeon. Pero vuelve a centrarse a lo que de verdad le interesa.
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World Wide Twice (Saida | Samo | Dahmo)
FanfictionTwice tiene un nuevo proyecto en su agenda: el WWT o World Wide Twice. Alzado por la compañía JYPE, consiste en visibilizar y defender la comunidad LGBT con la intención final de dar a conocer el grupo a escala global. El proyecto significará un gra...