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NARRA HARU

Maldita sea, ahora sabe lo de las cartas, no tenía por qué saberlo. Todo mi esfuerzo por esconderlas de él a sido en vano, aunque no totalmente ya que esas cartas ya no existen, sólo quedan meras cenizas.

Llevo días planeando lo que haré desde que leí la primera de ellas. Aún no logró sacarme el contenido de la carta de la cabeza.

"Hola mi lindo Makoto, estoy esperando por ti. Estoy completamente seguro de que escogerás lo mejor y eso soy yo. Muestra de esto es que siempre estuve contigo aunque no lo notases, aunque estuviéramos en clases diferentes.
¿sabes? Que mi hermano estuviera en ese club de natación no fue coincidencia, escogí ese club porque sabía que así volvería a verte. Esa fue la única razón por la que escogí únicamente ese lugar. Por ti.

Te he cuidado de lejos mucho tiempo, pero nunca fui capás de acercarme porque no pasabas ni un segundo separado de ese estúpido pelinegro. Las únicas oportunidades que tuve las usé para darle su merecido a Haru. La persona que no permitía que nuestros caminos de uniesen y cumpliéramos con nuestro destino; estar juntos. Y aún sigue impidiendonoslo.

Siempre a tu lado, Kisumi"

Simplemente no puedo contener mi ira al recordar esas palabras. "Nuestro destino; estar juntos." ESE ES NUESTRO DESTINO, NO SUYO.

Desde que lo vi nunca me dio buena espina. Siempre tan alegre y animado, simplemente no existen personas así.

Algunas se tragan sus problemas, otras los cuentas sólo a una persona, pero no existe alguien quien no tenga problemas y pueda sonreír sin culpas o que piense que sus problemas en realidad son motivos de felicidad.

Hoy por fin tengo claro como terminaré este asunto de una vez por todas; le mostraré su destino.

- ¡Haru!- chilló el castaño abriendo la puerta.

-¿Paso algo?- pregunté sacando el rostro del agua.

-¡Nagisa y Reí están en la estación de tren!- exclamó con una sonrisa en su rostro mientras se incaba a un lado de la bañera.

- ¿Qué hacen aquí?- pregunté sorprendido- deberían de estar ocupándose de las ideas para el reclutamiento de miembros...-

- tienes razón, pero...- puso ojos de cachorrito- ya están aquí, no podemos decirles que vuelvan- se levantó y extendió la mano hacia mí- ¿Vamos?- volvió a sonreír.

- está bien- respondí pesadamente, tomando su mano y saliendo del agua.

-¿Hay alguna vez que te hayas bañado sin el traje?- cuestionó entre unas tiernas risas.

Solo me encogí de hombros, saliendo del cuarto junto con Makoto. Me vestí con lo primero que encontré y salimos directos al encuentro.

-¿No te emociona, volverlos a ver?- el destello en sus ojos delata su emoción.

Le miré unos segundos, para después recargar la cabeza en su hombro y mirar por la ventana del metro.

- tal vez... Les extrañaba un poco...- murmuré.

Los juegos de Nagisa son molestos al igual que los exagerados cálculos de Reí, pero... Aún así, me parece algo rara la rutina sin ellos dos.

Hundió la mano en mi cabello, haciendo pequeños movimientos que, a decir verdad, me relajaban bastante.

Una vez llegamos a nuestra estación, nos bajamos y fuimos directos a la estación en la que se encuentran. Lo bueno es que no queda muy lejos.

- creo que tú y yo...- busqué sus verdes ojos - o-olvidalo, no tiene importancia- pidió con una sonrisa nerviosa.

Destinados ( MakoXHaru) D1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora