Besoterapia *HopeV*

TO

"Si una palabra te cambió el día, eso dice que un beso te podrá cambiar la vida".

Youngjae se recostó y suspiró por milésima vez, estaba demasiado nervioso por volar; no es que no lo hubiera hecho antes, sino que ahora era diferente.

Ahora iría a un viaje donde no iba a ser humillado, utilizado o herido; su viaje iba a ser con Jaebum... — ¿Estás nervioso?

La voz del pelinegro lo hizo dar un respingo, acomodó su camiseta un poco y miró hacía los demás pasajeros del vuelo; soltó un suspiro y se concentró en el comandante de ojos avellana. — Es mi primer viaje sin...

— ¡Jaebum! — el castaño guió su mirada hacia aquella voz que lo había interrumpido, para encontrarse con un joven delgado y peligris. — ¡Tanto tiempo sin verte, hombre!

Jaebum le regaló una enorme sonrisa a aquel joven. — ¡Kunpimook, tanto tiempo sin verte! — el comandante se levantó y abrazó al joven frente a él. —  ¿Cómo has estado?

Una sonrisa algo forzada se formó en el rostro del peligris. — Bien, los negocios van de maravilla y pronto la expansión del vino será toda una realidad. ¿Vas a Jejú? — Jaebum asintió. — Yo igual, iré a algunas reuniones pero espero poder salir a cenar contigo y tu pareja...

El comentario había salido sin querer, la verdad es que Kunpimook se había sorprendido; Jaebum era alguien atractivo, pero el joven a su lado parecía tan irreal...

Youngjae sintió sus mejillas arder, el rubor se expandió por su cuerpo y pronto, se vio en la necesidad de jalar un poco su camiseta para darle aire a su acalorado ser. — Claro, nos encantaría.

Y fue ahí, donde el castaño quiso enterrar la cabeza en el suelo, como si fuera un avestruz; porque estaba seguro que ahora se encontraba totalmente ruborizado. — ¡Perfecto, le diré a Mina que nos prepare algo de cenar!

Jaebum arqueó una ceja. — ¿Mina?

El peligris soltó una ligera carcajada. — Creí que Jinyoung te lo había dicho... — el comandante carraspeo. — Lo siento, creí que... — el peligris miró hacia Youngjae, quién no comprendía nada de lo que estaba pasando, pero supuso que era algo malo cuando Jaebum se apresuró a hablar.

— ¿Qué tendría que saber?

— Hace un año que estoy casado, JB... — el joven mostró la argolla que se encontraba en su mano.