PELIGROSAMENTE

Capítulo 11

-Stella, es un gusto verte –dijo Gabe mientras me veía entrar

-Lo mismo digo –contesté con una pequeña sonrisa. ¿Para qué querías verme? –pregunté

-Necesito que intentes ver a Chelsea de nuevo y trates de darte cuenta dónde está, por favor –suplicó

-Pero ya te lo dije, la vi en una celda de aislamiento, como la que me encerraron en Alfa –contesté

-Sí, lo sé, pero quiero que trates de al menos ver a alguien, no sé un guardia tal vez un líder, mira todas las celdas de aislamiento son iguales y sin la suficiente información no podremos encontrarla –dijo mientras daba vueltas en la oficina

-Pues mejor ¿no? Así vamos a todas las sedes y matamos a todos –contesté

-Solo hazlo, por favor –suplicó una vez más

-Está bien, dame la muñeca –accedí finalmente

Me la tendió y la tomé. Entonces me sumergí nuevamente en esa visión.

Lo veía todo desde la perspectiva de Chelsea, estaba sentada en la esquina de una habitación, viendo a un guardia que no paraba de decir que me mataría si no le decía de donde había huido y si había alguien más conmigo, el hombre estaba de espaldas, vi que se volteó y tuve la esperanza de reconocerlo pero estaba puesto un pasamontañas, debido a que me negué a hablar se acercó y me dio un golpe en la cabeza que me noqueó, aquí terminó la visión.

Solté la muñeca de golpe y me alejé exasperada.

-¿Qué ocurrió? ¿Qué viste? –preguntó Gabe

-Lo mismo, Chelsea en una celda, había un guardia haciéndole preguntas, no lo pude reconocer pues llevaba un pasamontañas, ella se negó a hablar y él la noqueó –expliqué

-Malditos, me pagarán todo lo que le han hecho sufrir –dijo Gabe para sí mismo

-¿Puedo saber por qué huyó? –pregunté

-Discutimos, ella quería ir a buscar a su mejor amiga, ella está en Alfa, yo me negué, le dije que era peligroso, así que decidió ir por su cuenta –contestó

-¿Cómo se llama su amiga? –pregunté

-Allison –contestó Gabe.

-¿Allison qué? O sea su apellido, ¿cuál es su apellido? –pregunté con voz temblorosa

-McGregor, Allison McGregor –contestó

Está de más decir que mi corazón se rompió en ese momento, la mejor amiga de Chelsea había muerto por mi culpa. Hasta ahí llegó mi fuerza, mi capacidad de no sentir nada.

-Te ayudaré a encontrarla, lo prometo –dije y salí de su oficina, necesitaba hablar con Stephan.

Corrí sin parar hasta que choqué con alguien y cuando levanté la vista era Elliot.

-Hey, hey tranquila ¿qué sucede bella durmiente? –preguntó al verme desesperada

-No es nada, no importa, necesito encontrar a Stephan –contesté casi sin poder hablar por la falta de aire

-Está en su cabaña –dijo Elliot. Pero ¿qué pasa? Tal vez puedo ayudarte –sugirió

-En este caso no, Elliot, esto es algo que solo Stephan entenderá, lo siento –contesté y me dispuse a seguir corriendo

Llegué a la cabaña y vi a Stephan dormido entonces fui a golpearlo hasta que despertara.

-¿Stella, qué pasa? –habló medio dormido

-Allison –dije. Chelsea –no podía hablar, cada vez las ganas de llorar se apoderaban más de mí

-Tranquila, respira, dime ¿de qué hablas? –preguntó

-Chelsea era amiga de Allison, de hecho era su mejor amiga, escapó para buscarla, pero Allison murió por mi culpa y ahora Chelsea corre peligro, debo encontrarla, yo, yo debo –finalmente rompí en llanto y Stephan me abrazó

-La vas a encontrar Stella, lo harás, estoy seguro de eso, confío en ti –dijo Stephan

-Te quiero –dije. Te quiero, has llegado a ser como mi hermano –continué

-Y yo te quiero a ti y así será, mejores amigos por toda la maldita vida, eres mi hermana del fin del mundo –contestó y me abrazó aun con más fuerza.