PELIGROSAMENTE

Capítulo 16

Gabe y yo nos quedamos en silencio dentro de su oficina mientras esperábamos a los demás para poner en marcha el plan, hasta que Gabe decidió romper el hielo:

-Stella, sé que te sientes mal por lo de Allison, pero créeme que no es tu culpa que hayan capturado a Chelsea –dijo

-Sí lo es, bueno quizá nada habría impedido que Chelsea salga en busca de Alli, pero si ella siguiera viva al menos su captura tendría sentido y podríamos haberlas rescatado a ambas –dije con tristeza

-Aun así, fue increíble encontrarte, encontrarlos quiero decir, ahora podrán ayudarnos a rescatar a mi hermana, quizá eso te libere de tu culpa, aunque como te dije, no es culpa tuya, no puedes salvar a todos Stella, es una lástima pero debemos aceptar eso en algún momento –dijo Gabe con mirada condescendiente

-Bueno sí, al menos de algo servirá, por eso Gabe, te prometo que aunque tenga que morir, Chelsea volverá contigo, lo prometo –contesté

-Bueno, llegamos, ahora que estamos completos es hora de ponernos en marcha –dijo Elliot

-Debemos esperar a la noche, deben saber que Gamma será fácil, pero Beta y Alfa no, ya que es posible que estén más preparados luego de enterarse de nuestro atraco en Gamma –dijo Gabe

-Y no teman usar sus poderes –dijo Elliot

-Claro, a menos que los neutralicen –respondí

-Debemos cubrirnos entre todos, no podemos perder a nadie –dijo Gabe

-Bien entonces en la noche nos reuniremos aquí a las 7 en punto, ahora pueden irse –dijo Gabe. De preferencia a descansar por favor –añadió

Salimos y Stephan y yo decidimos ir a nuestra cabaña a descansar pero Stephan fue a besarse con Lizzie a un lado y entonces Elliot llamó mi atención:

-Hey bella durmiente, ¿no hay un besito para mí? –dijo sonriente mientras estiraba su mano

-Claro que sí, es algo que no puede faltar –dije mientras me acercaba a él con una sonrisa y lo abracé y luego le di un pequeño besito

-Te quiero preciosa –dijo mientras me miraba, sus ojos brillaban de una forma muy particular, nunca nadie me vio de esa manera y era hermoso, él era hermoso

-Te quiero también –dije con una sonrisa y volví a besarlo, esta vez con más intensidad. Pero ahora debo dormir, debemos ir a descansar –dije y me alejé

-Stella espérame –gritó Stephan mientras corría tras de mí

-Y decías que no te gustaba –dijo Stephan dándome un golpecito en el hombro

-La gente cambia de parecer muy seguido –respondí

-Me alegro mucho por ti, mi niña, no te conozco mucho, pero en ese poco tiempo solo he tenido que verte triste y no sabes lo hermoso que es verte sonreír –dijo Stephan

-Yo me alegro de que hayas encontrado a alguien también –respondí

-Sí, bueno nadie podrá reemplazar a Hannah, pero no negaré que Lizzie es un sueño –respondió Stephan

-¿Sabes? Nunca pensé que alguien lograría hacerme sentir así, bueno exagero con nunca, claro que antes de todo esto, esperaba encontrar algo como lo que tenían mis padres, era maravilloso verlos juntos, se notaba todo ese amor que tenían y sabía que me merecía a alguien que me mirara de la manera en que mi padre miraba a mi madre, pero cuando desperté en esta catástrofe, todas esas esperanzas se desvanecieron, porque no consideraba posible que en medio de este desastre alguien pudiera ser feliz, pero ahora veo que me equivoco, no hay duda de que Elliot es increíble –hablé sin poder quitar la sonrisa de mi rostro ni un solo momento

-Bueno, quizá cuando terminemos con todas las sedes será mucho más fácil pensar en un futuro feliz –dijo Stephan

Habíamos ya llegado a la cabaña y cada uno se fue a su cama

-Hey, palomita, quiero verte siempre con esa sonrisa, no me gustaría volver ver a mi hermanita del fin de mundo derramar otra lágrima, te quiero niña –dijo Stephan

-Yo quiero verte a ti siempre feliz Stephan, tú eres la mejor persona que he conocido y no quiero perderte nunca, siendo franca, puedo perder a cualquier persona menos a ti, te quiero hermanito del fin del mundo –contesté sonriente

-Prometo que estaré siempre para ti, siempre vas a tener mi apoyo, no importa quien llegue, ahora a descansar –dijo Stephan y ambos nos dispusimos a dormir