I Need You - Demi Lovato y Tu

Capitulo 83

Desperté de golpe al sentir dos cuerpos caer sobre la cama, al querer observar de quién se trataba sentí como tres chicas me abrazaban, Dallas y Maddie nos unieron a mi y a Demi en un hermoso y caluroso abrazo

-Vamos chicas, el desayuno está listo- dijo Dallas separándose, giré mi cabeza para observar a Demi quién se encontraba bostezando

-Hoy deberemos ir al hospital Demi, Dallas hablo con el doctor y a las 5 de la tarde nos espera allí y para tu mala suerte ya son las 12 del día- abrí mis ojos sorprendida -si, son unas dormilonas- dijo con ternura Maddie separándose y acabando con el abrazo -cámbiense y bajen a desayunar, luego Demi alista tus cosas para cuando vayamos al hospital y tú- al referirse a mi sus ojos se cristalizaron -tú...- se quedó pensando por unos segundos -no se te olvide que te quedarás en la noche con ella así que alisten lo necesario chicas, las esperamos abajo- término de decir levantándose de la cama y saliendo de la habitación seguida por Dallas

-¿Quieres que nos bañemos juntas futura esposa?- me preguntó Demi de manera coqueta consiguiendo que sintiera calor

-Luego nos bañaremos juntas cariño pero ahora tu familia nos espera abajo así que vamos, ve a bañarte, yo me bañaré después- ella suspiro

-Báñate conmigo- dijo ella desnudándose frente a mis ojos, sin evitarlo recorrí todo su cuerpo con mi mirada sintiendo mis mejillas arder, me levanté con la intención de salir de la habitación pero ella fue más rápida y me sujeto del brazo con fuerza haciéndome girar quedando frente a frente, con rapidez ella me besó con necesidad y yo le correspondí de igual manera, sentí las manos de Demi por todo mi cuerpo quitando mi ropa, cuando tuvimos que dejar de besarnos por falta de aire, ella me tomo entre sus brazos y me llevo en volandas hasta la enorme ducha donde abre el agua y las dos gritamos divertidas al sentir el agua fría caer sobre nosotras. Los besos de Demi se intensifican y mi ansiedad por ella más. De pronto, me tumba en la ducha y se tumba sobre mí mientras el agua cae sobre nosotras. Su boca exigente me muerde los labios mientras siento sus manos recorrer mi cuerpo y éste vibrar por el contacto. Cuando abandona mis labios, su boca baja hasta mi pecho. Mis pezones están duros y, al mordisquearlos, me hace gritar. Sigue su andadura por mi cuerpo y siento que su lengua baja por mi ombligo, se entretiene en él unos instantes hasta que continúa su camino y de pronto se detiene. Al notar que ella ha frenado su exploración incorporo mi cabeza para mirarla y me doy cuenta de cómo me observa. Nuestras miradas se encuentran mientras ella me mira tras sus pestañas mojadas.

-¿Serás mía siempre?- dice ella y yo asiento.

-Lo seré siempre cariño- le afirmó. El cosquilleo en mi vagina es impresionante. Creo que voy a tener un orgasmo con sólo escuchar su voz, ver el morbo de su mirada y el cómo curva la comisura de su boca. Clava sus rodillas en el suelo de la ducha y, con urgencia, me coge de las caderas y me atrae hacia ella. La deseo. Ella se agacha e introduce su lengua en mi empapada vagina y me chupa. Busca mi clítoris, lo rodea con su lengua y juega con él. Lo mima. Lo estira. Lo devora. Me vuelve loca. Cuando lo tiene como ella desea con dos de sus dedos me separa los pliegues de mi sexo y siento como dirige su otra mano en mi introduciendo dos de sus dedos en mi vagina. ¡Me vuelvo loca!, ¡Calor...! El calor sube por mi cuerpo y, cuando me contraigo por un maravilloso orgasmo, ella no se detiene y mete un tercer dedo introduciéndolos hasta el fondo.

-Amo la idea de tenerte conmigo siempre- susurre ella mientras yo dejo que me mueva a su antojo. Diez... once... doce, sigue su bombeo sobre mí, mientras mi vagina se contrae a cada embestida y mi clítoris con su roce me hace vibrar más y más. Vuelvo a tener otro maravilloso orgasmo.. Instantes después, rueda a mi lado y las dos quedamos en el suelo de la enorme ducha mirando hacia el techo mientras el agua corre a nuestro alrededor. Su mano busca la mía y cuando la encuentra la aprieta. Se la lleva a la boca. Me besa los nudillos y dice:

-Te amo cariño y me haces la mujer más feliz de este mundo al querer ser mi esposa-.

Luego de una hora, tras la estupenda ducha que nos hemos dado y de la que estoy convencida que se ha enterado todo el mundo, bajamos de la mano dirigiéndonos a la cocina, al llegar todos nos observan con una sonrisa tímida.

-Preguntaría el porqué se han tardado pero las hemos escuchado- dijo Dallas riéndose y consiguiendo que mis mejillas se calentaran, estaba segura que me había sonrojado

-Dallas- dijo Dianna con seriedad

-No deberían olvidar que aquí hay niñas- siguió diciendo Dallas mirando a Maddie

-No soy tan pequeña Dallas y se perfectamente lo que ellas estaban haciendo- observé a Demi quien habría sus ojos como platos -dejen que se diviertan y hagan sus cosas, al fin al cabo sólo demuestran cuanto se aman- dijo Maddie levantándose y saliendo de la cocina, vi cómo los padres de Demi, Demi y Dallas se mostraban sorprendidos ante aquello.

-Yo mejor me retiro- dijo Eddie acercándose a Demi y dándole un beso en su frente, luego se acercó a mi e hizo lo mismo -les diría que para la próxima vez tuvieran más respeto pero...- yo lo observé asustada por lo que el se detuvo -ire a leer- dijo con nerviosismo y salió.

-Bueno chicas siéntense, ya les serviré el desayuno- dijo Dianna, Demi y yo hicimos lo que ella dijo, luego de unos minutos ya estábamos desayunando

-¿Como se encuentran chicas?, ¿cómo se sienten?- pregunto Dallas sentándose frente a nosotras al igual que su madre

-Estoy un poco asustada pero espero que todo salga bien y a decir verdad me siento muy entusiasmada, antes habría estado estresada y odiando la situación porque no tenía oportunidad y porque creía que me iría pero ahora, ahora me siento bien, me siento bien porque podré continuar y seguir con mi familia y tendré a mi lado a la persona que amo- al finalizar Demi yo empecé a toser porque me atoré, Demi empezó a darme suaves palmadas en mi espalda

-¿Y tú (tn)?- pregunto Dianna cuando yo ya me había recuperado, la observé con reproche antes de responder

-Estoy muy feliz porque Demi mejorará y se encontrará bien, días atrás le dije que los milagros existían y no me equivoque, espero que ella tenga la fuerza necesaria para continuar y pueda vivir plenamente esta oportunidad que la vida le a de presentar- sentí la mirada de Demi clavada en mi pero no fue capaz de voltear

-Todos estamos felices por su nueva oportunidad- dijo Dallas sonriendo pero era evidente que sonreía falsamente y más cuando sus ojos se cristalizaron -ella podrá continuar, nosotros nos encargaremos de eso- afirmó Dallas

-No es necesario- dijo Demi captando nuestra atención -en verdad esta chica que tengo a mi lado me brinda todo lo que necesito para continuar, ustedes no tienen que encargarse de nada, con tenerla a ella será suficiente- finalizó arrecostando su cabeza en mi hombro, sin evitarlo mis ojos se cristalizaron

-Yo... yo... yo iré a ver a Eddie- dijo Dianna con la voz entrecortada levantándose y saliendo de la cocina

-Yo... yo iré a buscar a Maddie- se levantó Dallas -terminen de desayunar y alisten sus cosas, yo pondré una película por si quieren acompañarme a verla- se retiró de la cocina, Demi levantó su cabeza y me observo

-¿No crees que se están comportando muy raro?- me preguntó, yo asentí

-Debo decir que si- levante mis hombros -pero es entendible, mañana será la operación- ella asintió, terminamos de desayunar, lavamos la losa que ensuciamos y nos dirigimos a la habitación, ayude a Demi a alistar algunas cosas, bueno, realmente yo solo aliste la guitarra y una muda de ropa para mi más un abrigo, Demi se encargó de empacar ropa y algunos libros para ella

-¿Porqué la guitarra?- me preguntó, yo levanté mis hombros

-Luego veras- le respondí y ella asintió.

Aun faltaban una hora para salir así que nos dirigimos a la sala a acompañar a las chicas con la película que se encontraban viendo.

En este momento sentía que el tiempo iba demasiado rápido y joder que deseaba detenerlo, ya era hora de dirigirnos al hospital.