VEINTIOCHO +18

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Dedicado a AnabellHernandez4

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ALEJO:

Su mirada se transforma mientras avanza poco a poco entre mis piernas, contengo la respiración debido excitación que me causa ver su lado sexual desatandose contra mí masculinidad.

Una nueva sonrisa surguio de sus apetitosos labios, me provocaba éxtasis con tan solo verla así.
Nerviosa jugó tocando mi dureza sobre la tela, podía notar su inexperiencia al hacerlo, no era brusca pero si algo torpe. Lentamente fue liberandome de mi ropa interior atenta a mi reacción y yo a la suya, una vez desnudo ante ella no pude evitar soltar un suspiro de placer. Sus ojos desorbitados miraban fijamente lo que pronto se llevaría a la boca, lo primero que hizo fue tomarlo entre sus manos y con suaves movimientos ascendentes y descendentes fue otorgándome placer. Un gemido surgió desde el fondo de mi garganta, ella aprovecho ese mínimo lapso de tiempo en el que cerré los ojos y se lo puso entre los labios, una ola de calor recorrió mi cuerpo haciendome retorcer al sentir su lengua explorar mi miembro. La tomé del cabello para guiar sus movimientos, subía y bajaba con total delicadeza, sus ojos no dejaban de ver mi expresión, por momentos con su lengua recorría todo sin dejar espacio sin cubrir. Mi respiración comenzó a agitarse, no podía reprimir los gemidos, ella aumentaba la velocidad por momentos haciendo delirar mi mente y provocando que todo mi cuerpo se agitara.

- Zaya... - susurré al borde del clímax.

Ella no me escucho, temia que aquello le resultará repulsivo.

Ayudada con una mano siguió moviendose a un ritmo frenético, sentía como mi dureza era tragada por su boca de un solo impulso.
No lo soporte más, retenerme ante aquella belleza me era imposible, exploté en sus labios, ella siguió introduciendoselo sin pudor hasta que no pudo más. Quedó exhausta mirándome acostada sobre mi abdomen.

- ¿Te gustó? - pregunto algo tímida.

- ¡Me encantó! - exclamé - ¿No era tu primera vez o si?

- Para ser sincera, si lo fue...

No supe si creerle o no, se levantó yendo al baño, aproveche ese momento para volver a vestirme.
Al volver me encontró esperándola de pie al borde de la cama.

- ¿Dormimos? - dijo acomodandose el cabello en un moño.
Al hacer eso, la camisa se levantaba dejando ver su ropa interior.

- Quiero devolverte el favor - respondí cortando la distancia entre ambos.

- ¿Favor?

Comencé a besarla suavemente, apoye mis palmas en su rostro y mientras el beso se profundizaba fui bajando hacia la camisa, uno a uno desabroché los botones que impedían que su desnudez se viera, me dejó hacerlo mientras tenia los ojos cerrados aguantando la respiración, veía como su pecho vibraba con cada latido.
Deslice la camisa de su cuerpo y cayó a nuestros pies, recorrí su piel con mis dedos, la notaba palpitar ante mi tacto, la besé nuevamente pero con más pasión, mis manos bajaron hasta sus senos al sentirme allí soltó un gemido sonoro; Sonreí al saber que aquello la enloquecía, quería ser el primero de todas las formas posibles.

- Te regalaré tu primer orgasmo - susurré en su oído.

- N-no...

- No te preocupes, hay muchas formas de hacerlo, ni siquiera te voy a penetrar - dije ante su negativa.

VOY A ESPERARTE |COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora