Nunca sere ella ║║ Jace Herondale y Tú ➀

Parte 54

Después de atravesar el portal llegamos al departamento de Magnus. 

___: no quiero hablar solo quiero alcohol por favor- me senté en el sillón y puse mi visión en un solo punto de la habitación.

Narra Magnus

Magnus: ¿qué es lo que pasó Isabel?

Isabel: no se exactamente lo que pasó, pero por lo que alcancé a ver fue de nuevo una pelea con Jace

Mis nervios comenzaron a revolotearse dentro de mi cuerpo, sentí como mi magia provocaba con salir por mis manos.

Isabel: tranquilo Magnus- sentí sus manos en mis hombros y me vió fijamente a los ojos

Magnus: lo siento pero ese niño teñido está provocándome dolores de cabeza... hay teorías que comienzo a formularme y me temo que no son nada buenas para nuestra querida _____- ambos volteamos a verla, estaba sentada o mas bien desparramada en el sillón de terciopelo rojo tomando un baso de... parece tequila

Isabel: ¿que tipo de teorías?

Justo en el momento que iba a contestarle a Isabel escuchamos un vaso estrellarse, sin pensarlo corrimos unos cuantos metros y encontré a _____ en el suelo, sobre los cristales llorando en el suelo. Juro por todos los años que llevo viviendo en este mundo que he visto cosas que me han lastimado, pero esa escena me partió el corazón. yo mismo se lo que se siente que la persona que amas te haga cosas como esas, lo pase con Camille.

Isabel iba a correr hacia ella cuando en su teléfono apareció una llamada de Alexander

Magnus: contesta cariño, yo la levantaré- caminé lentamente hacia ella y me inqué a su lado, tome su hombro e hice que volteara su cabeza para verme- déjame ayudarte mi niña- vi su alma partida en dos a través de esos ojos tan bellos, eso solo hizo que mi corazón se ablandara más, me dejó levantarla del suelo y la puse nuevamente en un sillón. Le quité los pedazos de cristal de las manos y rodillas, tenía cortes profundos y sangraba

Isabel: Magnus... tengo que irme hay una emergencia con unos cuantos demonios- solo chasqué mis dedos y escuche como atravesaba el portal.

Magnus: anda cariño vamos a curarte esto y después a dormir- me inqué y fijé mi vista en sus heridas, ella no dijo nada solo veía a un punto fijo del cuarto, era un cuadro con mas de trescientos años de antigüedad, me dejó curarle las manos y como traía un shorts pude curar sus rodillas y sabía que podía haber activado su runa y que todo habría sido mas rápido pero quería sentirme útil curandola.

___: gracias- puso su mano en mi cara, al estar incado ella me veía hacia abajo y yo tenia que alzar un poco mi cabeza. Por un tiempo acaricio mi mejilla y juro que nunca había sentido esto con nadie, y no me mal entiendan yo amo a Alexander y él es mi alma gemela pero _____ es esa hija que el destino me envió, y a pesar de haber tenido protegidos a lo largo de los años ella es una hija... buena jugada destino solo espero que si me los van a quitar a ambos sea dentro de mucho, mucho tiempo.

Cuando soltó mi cara, limpió una de sus lagrimas y se levantó, lo que hizo que también yo lo hiciera.

___: bien, no estoy aquí para causar lastima. Tenemos que beber Mags, anda vamos a disfrutar.

La entendía, quería ahogar sus miedos y penas en alcohol y ¿quién soy yo para negarle eso? a final de cuentas era la hora feliz en alguna parte del mundo

Magnus: bien retoño mio ¿qué quieres tomar?

___: mmm... empecemos por algo mexicano y vayamos dándole intensidad al asunto, quiero perder la conciencia. Tequila por favor.