En las sombras e escogido vivir

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Esperaba a Olivia debajo de nuestro árbol después de clases, mientras corregía las faltas de ortografía que Miss Cyntia me marcó en el poema que escribí, lo preparaba para un concurso que habría entre secundarias en un mes exacto, debía enviarlo al final de la semana, estaba nerviosa.
-Es muy bueno- dijo sonriendo, y me hizo creer que podría ganar.

-Hola- dijo una profunda voz masculina tan familiarmente y amigable, como si me conociera de toda la vida, levanté la mirada para verlo ahí parado, Ricardo, mi Zyro.
Reuní todo el valor que pude encontrar en mí interior para contestar de la forma más casual, y sin una onza de temblor en la voz -Hola qué tal?-
-Editt no?- dijo y mis mejillas se tornaron rojas, me habrá reconocido? Sabía quién soy?
-Miss Cynthia me dijo que buscara a la niña más alta y bonita- dijo y mi corazón se detuvo:Bonita!Dijo Bonita! Grité en mí interior.
-Güerita- corrigió y bajé la mirada, no quería que viera mi decepción.
-Que necesita Miss Cynthia?- pregunté con la intención de que sonara como que no me interesaba pero moría de curiosidad.
-Es ese no?- preguntó y procedió a leer  el título de mi poema -En las sombras e escogido vivir- yo abraze mi libreta fuertemente a mi pecho y lo miré un tanto molesta y preocupada.
-Perdona- dijo -Pero Miss Cynthia quería que te ayudara a mejorar algunos puntos de tu poema, el año pasado yo entré al concurso y lo gané con mi poema...-
-Querida Desconocida- interrumpí
-Si, como lo sabes?- contestó perplejo
-Ah, Miss Cynthia me lo dijo- dije nerviosa. Mentí. Lo sabía por qué yo lo había leído antes que nadie, fue escrito para mí.
Olivia salió de la oficina del Director y se dirigió a nosotros, sin más se presentó ante Zyro, y procedió a contarme todo lo que estaba mal con esta escuela, empezando por las reglas tontas acerca del uniforme. Un chico más alto que Zyro, con un cuerpo musculoso y con total indiferencia de nuestra presencia salió de detrás de Zyro, lo tomó por el brazo y entre dientes le dijo que ya era tarde para ir al básquet, su entrenador esperaba en la cancha. Zyro río mientras se dejaba arrastrar por el musculoso, me miró y dijo tan alto que todos los que aún estaban en la escuela escucharon -Te veo aquí mañana a esta misma hora- mi cara que apenas sentía alivio volvió a tornarse roja, sintiendo las miradas fulminantes de las otras chicas.
Le conté todo lo que había pasado a Olivia quien se encargó de recordarme que pasaría tiempo a solas con el chico más deseado de la escuela. De alguna forma no sentía que fuera la primera vez. Pero aún no podía decirlo, aún no debían saber.

Mi mejor amiga OliviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora