Camino hacia la escuela

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-Que él hizo queeeeeeee?- gritó Olivia cuando le conté lo del chico misterioso. Tuve que esperar a la hora de salida por qué hacía varios días que los maestros nos habían separado en el salón de clases por platicar demasiado y durante el recreo otras amigas se nos habían unido, no me sentía cómoda contándoles a ellas.
Le expliqué de nuevo la historia, incrédula reaccionaba riéndose de mi, y no la juzgaba, quien en su sano juicio hace ese tipo de cosas?
Caminamos bajo el sol de otoño por la ancha banqueta hacia mi clase extracurricular, ella quería conocer a este chico, sospecho que enverdad no creía en que él existiera.
Escuchamos unos pasos apresurados detrás de nosotras, una voz familiar nos llamaba a detenernos.
-Fernando- dijo Olivia alegre, y lo abrazó efusivamente.
-Hola- dije con vergüenza y molestia
-Puedo caminar con ustedes?- preguntó y su rostro era triste
-Claro!- dijo Olivia -Como estás?- preguntó.
Fernando nos contó sobre su nueva escuela, sus maestros, su nuevo equipo de basket. Sonaba tan apático a todo como siempre, nada le importaba lo suficiente. A mitad del camino volteó a ver a Olivia y ella se disculpó por qué olvidó que tenía que hacer algo que le pidió su mamá, se despidió de nosotros y nos dejó caminado solos. Al principio estuvimos en silencio, finalmente el dijo:
-Lo siento Editt- suspiró -Yo te marqué como mi pertenencia, desde que hablaste con Ricardo la primera vez-
Recordé cuando llegó y se llevó a Zyro mientras hablábamos de mi poema.
-A que te refieres?- pregunté confundida
Me detuvo tomándome de los brazos y volteandome hacia él -El estaba interesado en tí, pero yo le dije que me gustabas y se alejó... Por qué yo se lo pedí- me dijo mirándome a los ojos.
-Sueltame- le dije -por favor dime qué no es cierto-
-Lo siento, Editt, me gustas mucho, nunca te lo dije de frente pero creí que lo entendias- me contestó mientras intentaba abrazarme y yo luchaba por safarme de sus brazos fuertes, estábamos a una cuadra de la escuela si podía safarme correría hasta ella lejos de él, no podría entrar sin un ID. Luché un poco más hasta que sentí alguien jalarme hacia atrás, y ví a el chico que me besó ayer empujar a Fernando.
-Gracias por encontrar a mi novia- le dijo sarcástico y me abrazó
-Es cierto Editt? Este es tu novio?- contestó molesto sin voltear a ver al tipo.
No sabía quién de los dos era peor, pero en ese momento solo quería alejarme de Fernando, sentía odio por él, rabia e impotencia, todo este tiempo, mi Zyro...
-Si- respondí tomando la mano de este chico desconocido y caminando hacia la escuela.
-Que rápido olvidas- me gritó, y mi corazón se aplastó, comenze a llorar en silencio mientras entrabamos a la escuela y al salón, el chico se mantuvo en silencio también, se sentó a mi lado acariciando mi brazo tiernamente hasta que dejé de llorar.
-Gracias- susurré mientras lo volteaba a ver, su cara de sin vergüenza había desaparecido, y sólo quedaba un tierno rostro preocupado.
El maestro entró al salón deprisa, tarde de nuevo, comenze a pensar qué tal vez así sería siempre.
Se acercó y me susurró al oído -Nada te pasará mientras seas mi novia- y por alguna razón me sentí segura.

Mi mejor amiga OliviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora