Siempre es posible | Jamie y Dakota

Capítulo 19

-¿Qué quieres decir con no? -Jamie ya estaba de pie.

-¿Qué quieren decir ustedes con "luchar por ella"?

-No vamos a dejar que la apartes de nosotros, vamos a hacer lo que sea necesario para quedarnos con ella.

En el rostro pecoso del chico se dibujaba una expresión de sorpresa que pronto pasó a la confusión y al final se puso muy serio.

-Entiendo.

-Quizá lo lo entiendas del todo -Jamie se colocó de forma protectora al lado de Dakota. -Mañana que llevemos este sobre al abogado y veamos los resultados...

-¡Wow! Tranquilos, paren un minuto -Eddie puso las manos en alto para detener las palabras de Jamie. -No estoy entendiendo, ¿qué tiene que ver un abogado en esto?

-Estará a favor de nosotros -dijo ella.

-¿Y quién diablos está en contra de ustedes?

Hubo un extraño silencio, roto por un chillido de la pequeña al ver al gato de Grace pasando cerca de la bota del vaquero.

-Creo que ahora soy yo la que no entiendo.

-Miren, no sé en qué momento ustedes pensaron que yo querría quitarles a la niña.

Dakota y Jamie se miraron sin poder creer lo que acababan de escuchar.

-¿No piensas hacerte cargo?

Con la punta de la bota, él pisó la punta de la alfombra que cubría la sala.

-Yo no me siento, de alguna forma, parte de ella -miró a la pequeña que movía sus bracitos y piernas intentando seguir al gato. -Si en realidad es mi hija y ustedes quieren que pague alguna manutención o algo así no me negaré de ninguna forma, pero es solo que... no estoy listo para ser padre.

-Necesito sentarme -dijo Dakota pasando a Dulcie a los brazos de Jamie, los tres se acomodaron en los sofás en silencio, Jamie dejó a la pequeña en el suelo que se apresuró a tratar de atrapar al gato. -¿Has dicho todo en serio?

-Totalmente, yo la he visto criándose con ustedes, forman ya una familia, ahora mismo yo tengo un... proyecto importante, algo nuevo, que me hará estar alejado de Gatesville, empezaré una nueva vida en San Antonio, una niña no está en mis planes -sus mejillas se ruborizaron. -Pero como he dicho antes, si soy su padre, tomaré parte de la responsabilidad.

-¿Y o crees que pudiste decirnos esto antes, mucho antes?

-No creí que pensaran de esa forma -se encogió de hombros.

-Primero omitiste que podías ser el padre, luego solo dices que en realidad nunca te ha interesado ser su padre -Jamie sacudió la cabeza incrédulo.

-Una vez más, creo que en ningún momento di a entender que ese era mi plan.

-Pensé que buscarías vengarte quitándome a mi hija -Jamie le habló de frente con la espalda bien recta. -Primero pensé que querrías vengarte por el momento que perdiste la pierna, luego por Amelia... tienes muchas razones para odiarme.

-¿Odiarte? Jamie, yo siempre te he admirado, fuiste la razón por la que entré al ejército, mi madre me animó a seguirte, sí fue bastante trágico perder la pierna pero mírame -señaló la extremidad que de ninguna forma parecía falsa. -Estoy vivo, los accidentes pasan cada día, pudiste ser tú, u otro soldado, pero me tocó a mí y no dejo que eso me limite, Don me enseñó a sacar lo mejor de mí y otra gente se ha dado cuenta de mi talento, por eso conseguí un nuevo empleo, quiero vivir mi vida, conocer más chicas, ver un poco más el mundo, sería muy estúpido buscar vengarme por cosas que forman parte de mi pasado.