Capítulo 1

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Mi vuelo con destino a una ciudad de Inglaterra cuyo nombre es Bradford, ya había sido anunciado en el aeropuerto internacional de New York, por tanto ya era hora de que partiese. Fue muy difícil para mí decirle adiós a mis padres, incluso sabiendo que los vería de nuevo sentía una gran opresión en el centro de mi pecho que me dificultaba mucho respirar profundamente.

No estaba acostumbrada a permanecer mucho tiempo separada de ellos aunque mi padre esté casi todo el tiempo en viaje de negocios. La escuela a la que me trasladaba era un internado ubicado en el medio de la nada, cuyo nombre era Thomas Young. Queda en las afueras de la ciudad y está en el medio de un enorme y atemorizante bosque que verdaderamente me produjo escalofríos incluso en las fotos. Empezar en un nuevo colegio y en otro país es algo que no todos somos capaces de sobrellevar. Tenía la certeza de que me costaría un poco adaptarme, no suelo integrarme mucho, no porque me considere un bicho raro, es solo que al principio me es difícil hacer relaciones por miedo a que no les guste mi personalidad o que simplemente estuviesen junto a mí por lástima.

El internado nombrado fue fundado en 1940, en ese entonces era un orfanato. ¿Es un poco viejo  verdad? Yo también lo pensé en varias ocasiones, y debo admitir que al principio pensé en cuán aterrador podría ser dicho sitio por dentro ya que está lleno de enormes pasillos, sin obviar que el colegio es bastante grande y tenebroso, ubicado en una zona que no favorecía mucho. En el año 1990 pasó de ser un orfanato a ser el colegio que es ahora en estos instantes, pero mucho más restaurado, por supuesto.

Sentada en el avión muchas cosas pasaban por mi mente, dudas que me planteaba y rodaban en mi cabeza una y otra vez.

¿Sería capaz de hacer buenos amigos? ¿Sería capaz de depositar tanta confianza en ellos al punto de revelar mi secreto? Y la más importante para mí ¿Encontraría a personas igual que yo? Eso nadie lo sabría, por eso cada vez que sentía que se acercaba la hora de llegar mis nervios comenzaban a incrementarse. Siempre había encajado en todos los lugares en los que había estado, debido a mi personalidad, pero no sabía la razón por la cual sentía tanto miedo por no encajar en el grupo o peor, ser rechazada por mis propios compañeros.

Echaría mucho de menos a mis padres, mi antiguo colegio, a mis amigos, a todo el mundo. Echaría de menos mi libertad, poder terminar las clases y caminar por la enorme ciudad de New York olvidándome que el resto del mundo existe, totalmente desvinculada, solo con mis pensamientos rondando en mi mente una y otra vez. En fin, extrañaría muchas cosas, pero era por una buena causa, y la verdad es que esperaba que en serio el colegio tuviese el maravilloso prestigio que le han otorgado a lo largo de estos años.

El viaje fue muy agotante para mí, diría que demasiado para mi gusto, no porque no estuviera acostumbrada a los viajes largos es que estuve varias noches durmiendo muy poco, tenía que controlar un poco mi temperatura corporal antes de irme a un lugar lleno de personas que tendrán contacto conmigo y no podía congelarlos o simplemente tener temperatura anormal en mi cuerpo, como suelo tener cada día. Además de que los nervios me estaban invadiendo de tal forma que me estaba comenzando a desesperar, estaba ansiosa por llegar a mi nuevo colegio.

A pesar de que al principio la idea de irme a estudiar en un país extranjero separado de todos y de todo me pareciera algo irracional, la verdad es que después llegó a un punto en el cual comenzó a causarme cierto agrado y una ligera curiosidad, que estaba loca por saciar.

Cuando sentí la voz del piloto indicándonos que aterrizaríamos, que por favor colocásemos nuestros cinturones de seguridad, un fuerte salto se apoderó de mi estómago, causándome una sensación realmente conocida para mí: ansiedad.

Finalmente en tierra firme, después de estar volando por tantas horas, ahora mis pies medio adormecidos estaban tocando tierra, era como un sueño hecho realidad. Había llevado dos grandes maletas, repletas de ropa, comida, todo lo que me hiciese falta para sobrevivir en ese sitio tan alejado. Suelo ser bastante precavida cuando estoy en mi propia ciudad o por lo menos en el mismo país, imagina cuando voy de visita a otro.

Catching Feelings [Jeon JungKook][+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora