Pasaron 2 semanas, aún falta más de un mes para el gran viaje a Roma. Y mis sueños continúan.
Me encontraba estudiando y pasó algo inesperado.
Estaba en clase de Biología, un jueves cualquiera, todo normal, llegué a mi casa, almorcé el asqueroso almuerzo, como siempre, y subí a mi habitación. En ese momento mi móvil empezó a sonar y vi que era Leo!!!
"Que raro" me dije a mi misma pero estaba tan feliz..."querrá hablar conmigo? Que me dirá?"
Deje de pensar y decidí contestar.
-Hola?
-....-sólo escuchaba voces y ruido, seguramente marco mi número accidentalmente, decidí escuchar lo que decían.
escuche gritos...y gemidos..fue demasiado raro, no entendía lo que decían pero era una voz femenina.
Al instante me di cuenta que no era una conversación, más bien estaban haciendo algo, que no me agradó mucho.
Traumatizada colgué el teléfono y me vino una angustia indescriptible.
Desperté.
Me sentí aliviada, era otro de mis millones de sueños con ese baboso, ya empezaba a impacientarme de hablar tanto con el y que el tiempo pase demasiado lento.
En tanto a mis estudios, mis padres me advirtieron que si no sacaba un sobresaliente en matemáticas no viajaría ni a la esquina.
Me esforzaba mucho en la escuela, también la pasaba genial con todos los idiotas de mis compañeros.
Mi compañero de asiento, Raúl, era completamente distinto a mi.
Siempre estaba tranquilo y prácticamente indiferente al mundo, pero no se que mierda hacia para hacer los deberes y sobresalir en matemáticas más que cualquier persona, era excelente alumno y siempre salía, no hacia los deberes, sólo a última hora, eso me motivaba un poco a poder hacer las cosas más rápido y lograr no reprobar ninguna materia, pero no soy tan hábil, a decir verdad.
A pesar que Raúl era más frío que un iceberg, adoro abrazarlo y morder su brazo, es simplemente adorable!
Los días que no hablaba con Leo, me encontraba nerviosa, pensando en el, o escribiendo poemas para el (poemas que nunca se los iba a entregar) estaba enamorada.
Tenía 2 chicos a mis pies, no eran feos pero, no me atraían en lo absoluto.
Sólo quería a Leo, soñaba con Leo y no podía dejar de pensar en...ah si, Leo Castelli.
Seguía con mi idea de "mi enamoramiento temporal ya pasará" y no fue así, fue más fuerte de lo que pensé.
Un Miércoles, si bien recuerdo, pasaba clases particulares, y recibí un mensaje de Leo. Charlamos hasta que anocheció, olvide hacer todos mis deberes, nada importaba si es que no hablaba con el.
Todo era color de rosa, hasta que me contó una noticia que no me iba a alegrar, para nada.
ESTÁS LEYENDO
Masoquismo emocional
RomancePrometes no enamorarte. Te enamoras, te hacen falsas ilusiones y no te corresponden por distintos motivos, en este caso: distancia. Como superarlo? Dicen que el dolor es inevitable y sufrir es opcional, pero que tan masoquista es Kate, y qué método...