La nieve caía intensamente formando montículo tras montículo en las praderas, dejando un paisaje cubierto de Blanco. El viento azotaba con un feroz gruñido la montaña, los arboles decididos a no ser derribados y aplastados resistían la ventisca refugiando a aquellos animales que no eran capaces de sobrevivir por su cuenta. Aun con todo el caos, la montaña se mantenía tranquila. Era un típico día de pleno y congelado invierno.
Kaylan como todos los días realizaba la ronda vespertina por el territorio y por las cuevas. Se encontraba extremadamente irritable ese día, no hallaba el momento de regresar con Yunak y acurrucarse en su apetecible calor. Por lo general su pareja le acompañaba en cada una de las rondas y se la pasaban de maravilla en compañía del otro. Los demás lobos ya les veían como la pareja Alfa de la Manada del este y les respetaban como debiese ser en todo momento. Las últimas noches Kaylan hizo las rondas solo, temiendo de que algo le pudiese suceder a su pequeña pareja, ya sabía que el frío no le aria daño, pero quizá otras criaturas si quisieran hacerlo... aunque sabía que eso tampoco pasaría. Todos estaban enterados que Yunak no era el pequeño lobito indefenso que antes aparentaba ser, tenía bastante carácter y no necesitaba de su protección después de lo ocurrido... eso le ponía aun más nervioso. Aunque no se lo iba a decir.
Estando fuera de su cueva, se sacudió el resto de nieve que estaba sobre su lomo y se adentro dejándose envolver por el delicioso y placentero calor que emanaba del interior. Una pequeña fogata estaba encendida manteniendo a temperatura el lugar y al lobo que descansaba plácidamente sobre su enorme nido de paja. El Alfa se acercó sigilosamente observando el movimiento de las orejas de su compañero, avisándole que ya había notado su presencia y que se aproximara, pero antes de intercambiar palabras con su compañero su atención fue robada por los dos pequeños bultos escondidos entre el pelo de su pareja, chillando y gruñendo levemente trataban de manotear succionando la glándula mamaria en busca de mas leche.
-Hoy están irremediables.- Yunak susurro cansado. Kaylan se le acerco echándose tras él y rozando sus negras narices para reconfortarse mutuamente.- ¿Algo nuevo por el exterior?- pregunto medio incorporándose.
-Uhhh, Nada interesante, solo que me volaba en cualquier momento.-dijo olfateando y rozando con su nariz a los pequeños, los volteo para comprobar de que estuvieran cómodos. Tenían dos semana de Nacidos, Dos machos completamente Alfas dignos de ser los sucesores de esta manada.
Jack y Ramzi les habían nombrado. Ramzi era idéntico a su padre, con un bello y negro pelaje azabache, era realmente un espejo del Alfa, pero en miniatura. En cambio Jack era Algo poco común en colores de Lobos, Su pelo pareciese ser de un marrón oscuro con jaspeados plomizos y tonos Bayo Claro. Una completa rareza, pero le sería muy útil con el tiempo en sus futuras cazas, se mimetizaría con el paisaje. Aun no sabían el color de sus ojos, en un par de días los abrirían y verían que tan parecidos eran a sus padres.
Kaylan inspecciono la cueva encontrándose con el trozo de carne que le había dado a su pareja esta mañana. Agachando las orejas dijo -estoy preocupado... no has probado bocado en estas dos semanas.
El Omega suspiro y lamió la mejilla de su Alfa-tranquilo... no tengo hambre, quiero quedarme junto a los pequeños un poco más de tiempo, no deseo dejar el nido ni por un minuto, no los quiero descuidar.- se removía inquieto en el lugar.- Además, No es que haya el mejor clima en este momento como para salir a comer- intentaba desviar el tema.- o cazar o dar un paseo.- se rió nervioso.
-pero te debilitaras en estas condiciones amor, se que los pequeños son importantes, pero tu bienestar es necesario.
- todo estará bien tal y como estoy.- Yunak escondía algo extraño nuevamente. Su comportamiento sospechoso le recordaba a algunas cosas, un recuerdo del pasado quizá pensó Kaylan. Su mirada inquisidora alteraba cada vez más a su pareja. Hasta que soltó algo.- Mmm mi..... Instinto me dice que debo ir de caza para cubrir los requerimientos alimenticios de los chicos.
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Mi Alfa (Editando)
Werewolf-- α -- Kaylan es el alfa de su manada. generacion por generacion los alfas deben elegir a otro alfa como su pareja para seguir una línea, los betas no entran en esta línea y menos los omegas los cuales son una aberración y deshonor para la mana...