Capítulo 46

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ADVERTENCIA: este capítulo puede ser un poco sensible, así que se recomienda discreción.

***
Allison

No había salido de mi habitación en todo el día. No podía, no quería. Había hecho el peor de los delitos, había roto la confianza de las personas que más amaba. Los había traicionado de la peor manera y no había forma alguna de que me llegara a perdonar en un futuro posible. 

Luego de la publicación del vídeo, comenzaron a haber millones de comentarios, de especulaciones, de vídeos en YouTube, hashtags en Twitter, publicaciones, entre otras cosas. Era el escándalo del año, y yo era la protagonista. Yo era la causante de todo esto y jamás me lo perdonaría.

Desde que envié el vídeo, no había dejado de llorar. Sentía como las lágrimas salían y salían y como no tenían pensado detenerse en lo absoluto, y tampoco quería que se detuvieran. A esta hora seguramente los chicos habrán visto el vídeo y deben de estar odiándome a muerte, al igual que yo. Me odiaba, claro que lo hacía, me odiaba a tal grado que no podía ni verme al espejo sin querer gritarme, sin querer chocar mi cabeza contra el y romperlo en pedazos. Me odiaba al grado de no querer estar aquí.

Toqué mis brazos y los miré. Tenía en el cicatrices de las muchas veces en las que me  había cortado. Cicatrices que había olvidado por completo, que habían dejado de doler, pero por alguna razón, ahora duelen más que nunca, ahora las siento más poderosas, más presentes. Me duelen mucho más ahora que cuando me las había hecho. Sin embargo, hacían que me doliera mucho menos el dolor del pecho que sentía. Así que, abrí una de las gavetas de mi escritorio y saqué una navaja que me había traído conmigo de Nueva York, en caso de encontrar algún peligro en mi búsqueda para reunir a 5SOS.

Nunca imaginé que el mayor peligro que me encontraría iba a ser yo misma.

Miré el afilado objeto el cual devolvía mi demacrado reflejo, y sin pensarlo dos veces, la deslicé por uno de mis brazos. La cortadura no era lo suficientemente profunda como para dejar una cicatriz, pero fue lo suficiente como para que mis demonios se alejaran por un momento.

Vi el líquido salir de la cortadura, y me preguntaba cómo sería nunca haber nacido, nunca haber existido. Como sería nunca haber conocido a estos chicos. Como habría sido haber tenido unos padres que me amaran. ¿Me habría gustado 5 Seconds Of Summer de ser así? ¿Habría conocido a Chloe y a Sasha? ¿Andy habría conocido a Denise? ¿Hubiera llegado a ser feliz? ¿Realmente feliz? Comencé a reír. ¿Por qué pensaba es estas cosas tan absurdas? Mis padres no me aman, nunca he sido feliz y no lo seré cuando vuelva a vivir con ellos. Me encerrarán y me tendrán como su prisionera por lo que resta de mi vida.

A no ser que...

Volví a postear mi mirada en la navaja que tenía en mi mano. ¿Y si acababa con todo ahora? ¿Y si escapo de esta vida una vez por todas? ¿Y si les ahorro tanto sufrimiento a Andy y a Denise? ¿Y si...?

No tuve tiempo de pensar en otra razón, mi mente estaba demasiada turbia como para seguir pensando. Ya no tenía razón de vivir. Ya no tenía esperanzas. Así es que iba a morir. Desangrada en mi habitación, sin mi perdón y sin el perdón de los chicos. Sola, sola y desolada.

—¡Allison! ¡Carajo! ¡ANDY! ¡ANDY VEN! ¡LLAMA A UNA AMBULANCIA! ¡ANDY!

No pude escuchar nada más, pero estaba feliz, porque tuve la oportunidad de escuchar la voz de Denise por última vez al igual que el nombre de mi hermano.

Y todo se volvió oscuro.

Narrador

La ambulancia llegó a los pocos minutos de recibir el llamado desesperado de un hombre llamado Andy Snow, el cual entre sollozos informaba que su hermana se encontraba en su habitación rodeada de sangre con cortaduras en sus muñecas. Suplicaba que llegaran pronto, porque ella era su única familia, y la amaba demasiado como para perderla.

Recuperando a 5SOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora