Capitulo 33

430 24 5
                                    

Capítulo 33. "No hace falta decir con quién. ".

-Solo me golpeó el rostro, no hay problema.- Añade, el deseo en su voz.

-No.- Empieza a dejar pequeños recorridos por mi cuello, dándome cosquillas.-No...

-Se que quieres.-  Ahora se empieza a quitar los pantalones.

-No, iré a buscarte algo para comer.-Trato de levantarme, pero el me agarra del brazo.

-Lo único que quiero comer aqui, eres tu.

Ay, virgencita.

Como negarse a esto?

-Esta bien, pero con cuidado.-Acepto por fin, el solo sonrie y me quita la ropa. Quedándonos en ropa interior. 

Leer bajo tú consentimiento ⚠️

-Quiero tocarte...- Delicadamente, empieza a quitarme la ropa interior. Rio al ver que no puede desabrochar mi sosten.-Aghh.

-Deja.- Me desabrocho. Ahora mis pechos estan a la vista.

- Eres muy perfecta.- Me besa cada pecho. Admirandome.

- Ya lo sé.- El rie. Luego empezamos a besarnos con pasión. Introduce su lengua. Emite un gemido.- ¿Que pasó? ¿Te lastimé?

- No, es que tengo roto el labio.- Dice, tocándoselos.

- Sabía que no era una buena idea.- Empiezo a ponerme la ropa interior. Pero el se levanta, enojado ,y me detiene.

- No.

- Si. - Me tira a la cama. Me asusto. - Quiero oírte gemir. - Fuertes declaraciones. Cómo se que soy una loca pervertida que solo quiere sexo, lo vuelvo a besar. El solo me quita las bragas que me había alcanzado a poner.

- Estoy lista. Pero si estás adolorido no lo hagas, quiero verte bien.- El solo sonríe. Sus mejillas están sonrojadas, producto de la excitación.

- Lo estoy y más si estoy contigo.- Y de un abrir y cerrar de ojos. Cuando menos lo esperé. Introdució su miembro en mi intimidad. Moviéndose rápidamente, hasta el fondo. Dolía, pero se sentía mucho placer. Demasiado. Empezó más rápido con sus embestidas.

Gimo. Siempre me decían que parecia el exorcista cuando tenía relaciones. - Ay....

- ¡Quiero más!- Gime Cameron.

~¡No, Cameron!- Todo lo que sigue a continuación, creo que son gemidos.

~ ¡Te amo, Makayla!

Sigo exclamando sonidos de placer.

~ Di mi nombre.

~¡Cameron!

~ ¡Más fuerte!

~ ¡¡CAMERON!! ¡AY! ¡ESTÚPIDO! TE AMO...-Gimo con ganas. El sonríe feliz. Me excitaba cada vez más. Sabía que esto solo estaba comenzando.

~ Necesito más de ti.- Con su miembro dentro de mi. Empezó a succionar cada pecho mío. Con ganas. Mordiendolos suavemente, pero provocandome cierta pasión. El orgasmo estaba cada vez más cerca.

~ Estos pechos, este trasero, todo de ti es mío.- Posesivo. Lo pienso, pero no lo digo. Saca su miembro, toco sus abdominales, empiezo a besarlo. Después suscciono la piel de su cuello, dejándole morado, chupetones que cuesta que se salgan.

~ Métela de nuevo, Camarón.

- Estás mojada.- Empieza a tocar mi intimidad suavemente. Yo solo gimo, tratando de no hacerlo muy fuerte. Yo también quería tocarlo. Toco su miembro. Entonces, sin pensarlo, lo succiono. El gime. Yo solo sigo chupándolo con ganas, como si fuera un chupete.

Campamento de perrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora