IX

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aquí hay un nuevo cap, espero les guste y muchas gracias por apoyar la historia, de poquito en poquito vamos creciendo.

este cap es dedicado a   TheBlackNightmare  espero te guste cariño:3

sin mas aquí el cap.

sin mas aquí el cap

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Se levantó con un fuerte dolor de cabeza, se sentía desorientado y sus ojos se encontraban tan inflamados que se veían pequeños, así que los abrió lentamente, acostumbrándose a la luz, sin embargo, al dilatarse sus pupilas, tuvo que parpadear varias veces antes de acostumbrarse.

Poco después, reparó en el brazo que lo rodeaba fuertemente y en el hecho de que su cara estaba pegada a un torso desnudo, y, si no se sobresaltó, fue sólo porque de verdad se sentía pésimo; su boca estaba seca, tenía un poco revuelto el estómago, y, además, sus ojos ardían, signo inequívoco de que había estado llorando por mucho tiempo. Se removió con cuidado notando una cabellera azul, y su corazón se estrujó al reconocer a Sasuke. ¿Qué hacía ahí?

Pudo sentir los labios del peliazul sobre su sien y notó que parecía abrazarlo con impotencia y protección, en ese instante no supo si enternecerse o molestarse, sin embargo, no fue necesario hacer mucho para que Sasuke se despertara, lo sintió en la forma en la que lo agarraba, su abrazo se aflojó un poco y luego lo escuchó respirar profundo.

—¿Estás bien? —dijo con voz ronca y Naruto se mordió el labio.

—Sí —murmuró—. ¿Qué hago aquí?

—Pienso que querías follar conmigo —había burla en su voz, también había algo más oculto.

—¿Lo hicimos?

—No —dijo sin más.

—¿Entonces? —se alejó para verlo a los ojos encontrándose con que Sasuke estaba serio y tenía el ceño levemente fruncido, parecía haber una batalla dentro del Uchiha.

—Lloraste mucho anoche...

Sasuke aun podía ver esos delicados ojos azules hinchados y achinados por todo el llanto de la noche anterior, así que, sin poder contenerse, llevó su pulgar hacia sus mejillas, acariciándolo, mientras que el rubio buscaba su mano como un gatito.

—¿Por qué? —dijo el rubio.

—No lo sé —susurró—. ¿Cómo quieres que lo sepa?

Entonces, Naruto se alejó y Sasuke lo vio con confusión, luego trató de sostener su mano, pero el rubio no lo dejó, por lo que no pudo evitar que se levantara de la cama para arreglarse.

—¿Te vas? —preguntó.

—Sí —dijo con voz baja—. No quiero ser un estorbo para ti.

—¿Qué...? —y fue ahí cuando entendió que Naruto había recordado lo que sucedió—. No fue nada. Esa chica no es nada.

Tu destino está atado al míoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora