Nueve. Anyway.

4K 308 17
                                    

Gilbert Blythe

__________________________________
-Hey Gilbert.- Escucho detrás de mi. Billy.- ¿Cómo te va?

-Bien.

-Tienes que volver a la escuela amigo. La horrible huérfana de Lucy está fuera de control, claro, con la ayuda de Anne.

-¿Qué les importa?- dije caminando con un gran saco detrás de mis hombros.

-Necesitamos un chico para demostrar que no son tan inteligentes.

-Ellas son inteligentes. Especialmente Lucy. Lidien con ello.- detrás de Billy, estaba Moody y Charlie.

-¿Por qué tienes que ser así amigo?

-¿Por qué no buscas un libro y te ciudas tú solo?-Billy se detuvo un segundo.

-Si,- dijo retomando el paso- claro. Bueno amigo.

-No soy tu amigo.- lo mire y me detuve.

-Si, claro.

-Y si alguna vez vuelves a molestar a Lucy, te arrepentirás.

-¿Cuál es tu problema?- pregunto al darme la vuelta.

-Preguntalo de nuevo.- Billy me miro- No, en serio adelante.

Al ver que se quedo callado, seguí mi camino.

-¿Cuál es tu problema?

Me gire y le tire encima el saco. Me acerque y lo golpee con fuerza en la casa. Calló al suelo y me tire con él para golpearlo. Billy me golpeo y eso me hizo caer hacia atrás, el corrió y se subió sobre mi para golpearme. Sin saber como, yo ya estaba levantado y Billy estaba tirado en el suelo con un gran hematoma en la cara.

________________________________________

Lucy Eckermann

No recuerdo cuando fue la última vez que me emocione con algo, hasta ahora.
Estaba parada frente a la puerta de Gilbert Blythe. Me trate de ver bien, presentable, pero el temor me mataba.
Toque una vez. Nada, lo intente de nuevo y nadie abrió.
Me acerque a la ventana más cercana y mire a través de ella.
La mayor parte de los muebles estaban cubiertos por sabanas blancas. Gilbert se iría. Pero, ¿a dónde? ¿con quién estará?

Me aleje lentamente y regrese a casa. Vi la carretilla terminada una vez más y entre a casa.
Todo estaba frío. El silencio era algo aterrador y hablar en voz alta lo hacia cada vez más silencioso.

Mientras preparaba la comida, escuche que tocaban la puerta rápidamente y con fuerza. Me acerque corriendo y al abrir la puerta. Anne me abrazo.

-Oh Lucy...

-¿Qué pasa Anne?

-Matthew... Esta enfermo...

-¿Qué tiene? ¿Estan bien?

-Algo del corazón. Marilla me contó que Matthew pidió un préstamo y no tenemos con que pagarlo. ¡Oh Lucy! ¡Nuestra vida es un cementerio de esperanzas!

The color of your words. [Gilbert Blythe]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora