Bienvenido a Berlín. -Fassavoy.

Capítulo XXXVII.

Estrategias.
Sábado 17 noviembre.

—Recuerda seguirme la corriente, no queremos que esto salga mal. —dijo entre dientes.

—Claro, ¿Y qué papel tendré aquí?—preguntó James observando el lugar.

—Eres mi esposa y te llamas Amanda.

—Vaya, ¿ahora soy tu esposa?, se supone que tú pensabas que estaba loco.—rió.

—Lo pensé, pero servirá de algo. ¿Los demás ya llegaron?

—Sí, están por haya, en la barra de bebidas.—miró hacia esa dirección, mientras que Michael se enfocaba en encontraba a Hugh.

—Solo te recuerdo que esto es algo elegante y no puedes andar como es tu costumbre.

—¿Crees que no sé comportarme?, Aún no me conoces, Fass.

—Dos whisky's, por favor. —le dijo al que los atendía— Tienes mucha razón, aún no te conozco lo suficientemente.

—Deberíamos de ir con los demás, esto es aburrido. —James murmuró.

—Sospecharan. —lo jaló del brazo— Sólo ten paciencia, McAvoy. —susurró en su oído—Ahora disfruta de tu whisky.—se lo entregó.

—Es lo único que puedo hacer. —al voltear hacia atrás, James se encontró con Lisa quién iba entrando con Evan— Maldita sea.

—¿Qué es lo que pasa?—preguntó Michael preocupado al ver que McAvoy se abrazó a él.

—Esa chica me reconoció.

—¿Cuál chica?, Hay varias aquí.

—Cabello hasta los hombros, vestido color plata sin espalda.

Michael volteó discretamente y de inmediato Lisa desvío su mirada.

—¿Quién es y de dónde la conoces?—le dió un sorbo a su whisky.

—Lisa Liberati, trabaja para Hugh Jackman. La conocí aquella noche en el Club de Jazz y además me acosté con ella. —se separó de Michael.

—Atento, aquí vienen nuestros amigos. —susurró.

—Agente Fassbender, un gusto verlo, ¿Qué tal le ha ido con la investigación?—preguntó McKellen.

—Es todo un laberinto, pero las piezas ya están encajando. —sonrió— Hola señor Patrick.

—Que tal, Michael. —le saludó.

—Les presento a mi esposa, ella es Amanda Elizabeth, Elizabeth ellos son Patrick y el jefe McKellen.

—Un gusto conocerla, señora Fassbender. —McKellen besó la mano de James.

—Ah, el gusto es mío. —James trató de que su voz sonará lo más femenina que se pudiera.

—Muy linda su esposa, ¿Cuando es que se casaron?

—Nosotros...—Fassbender lo interrumpió.

—Nosotros estamos por casarnos, nos conocimos hace semanas.

—Entonces es tu prometida, ¡Que bien!, Los felicito, al fin superaste tu pérdida.

Michael miró con enojo a McKellen, James lo notó y lo tomó de la mano.

—Cariño, ¿Recuerdas lo que te dije?—lo miró advirtiéndole.

—Claro, pero estamos aquí con el jefe McKellen. —respondió.

—No se preocupen por mí, ya debemos irnos. Tengo que prepararme para mí discurso al igual que Patrick.

—De hecho, debemos ir ya. Un gusto conocerla, señorita. —Patrick se despidió y McKellen sólo se marchó.

—Estuvo cerca. —McAvoy se puso en frente de él.— Casi lo arruinabas por tus ataques de ira.

—No me agradó en la forma que lo dijo.—respondió molesto.

—Iré con los demás, por favor trata de calmarte. —se fue, Michael miró hacia su izquierda, ya que sintió una mirada. Era una chica de vestido azul y de un rostro que se le hacía muy familiar.

—¿Estabas buscándome?—dijo Hugh poniéndose frente a él tapando a la chica.

—¡Hugh, pensé que lo habías olvidado!, Iba a buscarte apenas.

—Te dije que yo lo haría, ven sígueme. —lo jaló del brazo, Michael aún seguía mirando hacia aquella dirección en donde se encontraba hace un momento la chica, mientras que  Jackman hacia señas desde lejos a McAvoy.

—Ella está aquí. Se supone que estaba segura en mi departamento, Hoult.

—Lo estaba, al salir nos aseguramos de eso y lo ¡Estaba!, ¿Cómo pudo escapar?—dijo alterado.

—Es agente del FBI, duh. —Jennifer rodó los ojos— Tiene sus propias estrategias.