Tras él asesinato de Alicia Vikander. El casi ex agente de la FBI, Michael Fassbender viaja a Berlín para encontrarse con su contacto asignado, James McAvoy.
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✓No soy profesional escribiendo historias, así que comprendeme, sólo lo...
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Michael llegó al Bar, había demasiada gente y muy buena música. A lo lejos en la barra pudo ver a Hugh Jackman algo nervioso.
—¿Puedo sentarme aquí?—preguntó e hizo que éste diera un sobresalto.
—Claro. —se quedó atónito al verlo. —Vaya, te ves increíble.
—Dejame decirte que opino lo mismo de ti.—Michael le sonrió.
—Ah, ¿Whisky?—preguntó tratando de ocultar su sonrojo.— Pensé que te gustaría, ayer note quería estabas bebiendo eso.
—Si que pones demasiada atención.
—Busco el placer en los detalles... ¿Podría decirte algo?—se acercó a él.
—Por supuesto. —le dio un sorbo al whisky.
—Tienes unos lindos ojos, aunque no puedo distinguir de que color son en medio de todas las luces de colores.
—¿Estás coqueteando conmigo?
Ambos rieron.
—Bienvenido al Bar Attitude. —guiñó su ojo.— Y gracias por notarlo.
—Debí de haberlo notado desde ayer.—dejó su trago en la barra.
—Quería hacerte una pregunta.
—¿Qué clase de...?
Michael fue interrumpido debido a que Hugh se acercó a el y lo besó.
Fassbender despreocupado siguió el beso, hasta que Hugh decidió separarse.
—Vamos a un lugar más privado. —lo tomó de la mano.
Hugh llevó a Michael a un lugar no tan lejos de la barra.
Fassbender no resistió más y besó a Hugh, éste siguió el beso.
Michael pasaba su mano por la espalda de Jackman, hasta que encontró un arma y se detuvo.
—¿Porqué el arma, Hugh? —preguntó y al mismo tiempo Michael lo apuntaba con ella.
Jackman rió.
—No estás tan disfrazado como crees. Sé quien eres... Eres Michael Fassbender, agente estadounidense y estas aquí por la muerte de Alicia...
Michael lo aventó hacia la pared y Jackman se quejó.
—¿Qué sabes tu sobre Alicia?—preguntó aun apuntándolo con su arma.
—Nada. Absolutamente nada, solo estoy en este negocio porque era excitante para mí... Hay un doble agente que está cazando a tus elementos aquí en Berlín, nos ha estado observando.
Michael guardó el arma.
—Hubieras sido jefe de oficina, te quedan bien los trajes y esos pantalones tan apretados hacen resaltar tu gran trasero.
Hugh rió, Michael solo observaba cada detalle de su rostro mientras se acercaba a él para besarlo nuevamente, hasta llevarlo a una habitación del lugar.
El beso se volvió deseoso, reflejaba la pasión y el amor que sentían el uno al otro.
Hugh se estremecía al sentir las manos de Fassbender debajo de su camisa.
—Maldita sea.—susurró Hugh con una gran sonrisa en su rostro, mientras tanto Michael lo empujó hacia la cama, para después ambos desvestirse.
Fassbender agarró las piernas de Jackman y las puso en sus hombros para comenzar a embestirlo con rapidez y dureza.
Hugh Jackman solo se dejaba llevar, mañana pensaría muy bien lo que hizo toda la noche y sobre que pasará después de todo lo sucedido entre el agente estadounidense y él.
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—¿Así que contactó al agente francés?—preguntó McKellen asombrado después de escuchar esa parte de la historia.
