Especial
Narra Jeha
Solo faltaban unos cuantos días para la boda de mi padre junto a Annalisse ¿Si estaba contento por esto? No, no lo estaba. Era feliz cuando mi padre no lo era, yo solo quería que esa persona que se hacia llamar mi padre jamás encontrara ese "amor verdadero" que siempre buscaba.
Pero apareció Annalisse para iluminar su puta vida. No era una mala mujer, no voy a negarlo pero porque tuvo que enamorarse de un idiota empresario ambicioso como lo era mi padre. Ahora puedo sentir ese calor familiar del que escuchaba a mis amigos hablar del cual yo era escéptico ya que jamás lo tuve. Aun recuerdo todas las peleas que mis padres tenían, en las cuales algunas terminaban lanzándose lo que sea que tuviesen cerca de sus manos.
- Desearía, jamás haberte conocido. ¿Cómo es que nunca me di cuenta la clase de mujer que eras? Aún... aún cuando mis padres trataron de sacarme las vendas que tenia en los putos ojos, yo... mierda, yo te amaba Stella.
Su primera discusión estaba tatuada en mi mente, desde ese día mi "hogar" era un jodido infierno y nadie ayudo a apagarlo.
Siempre culpaba a mi padre de todo pero cuando iba creciendo, comencé a ver las cosas de distinta manera. Ahora sabia porque Kendall quería dejar a Stella.
Toda mi infancia estuve en juzgados para ver quien se quedaba con el puto niño. Temporalmente le tocaba a mi madre tenerme durante quince días pero esa mujer prefería hacer cualquier cosa menos estar conmigo, no recuerdo si alguna vez ella me dijo que me quería, no recuerdo un abrazo de su parte. Luego me tocaba otros 15 días más con mi padre, todo el día se la pasaba en la empresa porque era más importante forrarse de dinero que darle un poco de atención a su puto hijo. No recuerdo haber recibido algo de alguno de los dos, o tal vez mi odio hacia ellos hizo , que los pocos recuerdos que tenia juntos, que mi mente los borrara para siempre. Ellos jamás estaban, si me caía una niñera ayudaba a que yo me levantara.
Son muchas las razones por la que no quería que ese hombre fuera feliz.
A los 13 años nos mudamos a Hawái fue difícil aprender ingles pero era tanta mi desesperación por no poder comunicarme con los demás que en solo once meses logre hablarlo fluidamente. Entre a unos de los institutos más caros del país y allí conocí a mi amigo y hermano, Cameron. Ese mismo año comencé a escapar de casa, unos años más tarde estaba borracho en algún bar al que entraba gracias a una falsificación falsa , después comencé a fumar marihuana era algo que odiaba hacer pero la necesitaba para salir del mundo en el que me estaba ahogando.
No creo en el amor, es que ¿Cómo creer en algo que jamás has tenido?. Las personas que están enamoradas son demasiado hipócritas, dicen amarse pero el apoyo de parte de los dos no está, si tienen la oportunidad de estar con alguien más, lo están. ¿Cómo puedes amar y aún así lastimar?. Eso es lo que aprendí de mis padres.
- Cariño, tu desayuno-
Annalisse siempre estaba levantada mucho antes que yo, por lo que todas las mañanas desayunábamos juntos. Al principio se me hacia extraño que alguien me preparara para desayunar y que mucho mas extraño era que aunque ella no este aun por comer se quedaba allí para acompañarme. Siempre hablamos de cualquier cosa que se nos ocurriera, le gustaba charlas y cuando no estaba en el trabajo ocuparse de su familia. En ese sentido envidio con todo mi ser a Bella, a ella jamás le fato el color y cariño de sus padres. Y aunque James y Annalisse estén separados, ellos aún se llevan bastante bien. Bella lo tenia todo, en todos los sentidos.
- ¿Falta mucho por hacer aún? - pregunto
Annalisse suelta todo el aire que había en sus pulmones.
- No, solo faltan los vestidos - dijo - esta todo preparado. - Asiento con mi cabeza y me concentro en acabar lo que queda de café en mi taza.
- Jeha - aclara su garganta - yo sé que todo esto para ti no debe ser fácil. Cambiamos tu rutina ciento ochenta grados y ahora estas viviendo en una casa que no tiene todos los lujos a los que estas acostumbrado. Pero prometo que encontraremos otra casa donde te sientas a gusto.
Había escuchado que Ann tuvo que vender su anterior casa porque a Bella no le gustaba, ella decía que esa casa no parecía a un hogar y que quería volver a la casa donde había crecido.
- Annalisse, me gusta muchísimo esta casa, no lo cambiaria. Si, es cierto que no es grande como en la que vivía pero créeme cuando te digo que es mejor vender ese lugar porque, podíamos estar en verano a las 15 de la tarde pero aún así ese lugar era un glaciar.
Mi habitación estaba al lado de la de Bella, nuestra relación había mejorado después de daros una tregua pero ella ni siquiera voltea a verme después de que la besé.
No pregunten la razón por la que lo hice, simplemente no lo sé. Pero al verla así de cerca no pude contenerme, solo coincidimos para él almuerzo pero no nos mirábamos. Algunas noches salía con Lucía a alguna fiesta y de tanto que tomábamos, al otro día amanecíamos los dos en la misma cama, sin ropa.
Cuando me quedaba en casa podía escuchar a Bella llorar después de que tenia una pesadilla, sabia que no estaba bien y saber que tenía insomnio, me preocupaba. Cuando la escuchaba sollozar sentía unas tremendas ganas de ir y abrazarla pero sabia que si entraba a su habitación de inmediato me correría.
Miraba el techo de mi habitación cuando el sonido de mi celular me saco de mis pensamientos.
"Stella" figuraba en la pantalla. Deslizo el dedo para atenderla y ya sabia que era mala idea hacer eso.
-Hola - dije seco
- Jeha, hijo mío. Disculpa la hora, pero es algo demasiado urgente.
Me siento rápidamente en mi cama.
- ¿Paso algo con Samuel? - pregunto con el corazón en la boca.
- No, tu hermano está bien. Quería saber si es verdad la noticia que he escuchado hoy cuando fui a la compañía de tus abuelos.
- Sabia que solo llamabas para saber información. Das asco Stella.
- Jeha ¿Es cierto que tu padre esta por casarse?
Me quedo en silencio debatiendo si decirle la verdad o no.
- Si - digo finalmente. Es que igual iba a enterarse.
- Entonces también es verdad que están viviendo en casa de esa mujerzuela. No permito que estés ahí - habla alterada - Hoy mismo saco tus boletos para que vengas a casa, no puedes vivir junto a la mujer que me quito a tu padre - grita.
- ¿Se te olvida que soy mayor de edad y puedo hacer lo que me da la regala gana? Te diré lo mismo que le dije al idiota de Kendall, no quieran venir a darme ordenes ahora cuando ya no los necesito - digo y cuelgo.
Tiro mi celular haciendo que diera en la pared.
Jamás llamaba para saber como estaba, si seguía vivo.
Ellos simplemente pasaban de mi.
Editado el 19-julio-2021
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DEJARLO TODO POR AMOR 📝[RE-ESCRIBIENDO]
Jugendliteratur#95 Hermanastros #70 Hermanastro ▪QUEDA TOTALMENTE PROHIBIDO COPIAR O REDACTAR ESTA HISTORIA. SI VEO QUE ALGUIEN LO HACE TOMARÉ MEDIDAS SOBRE ESTO.