DEJARLO TODO POR AMOR 📝[RE-ESCRIBIENDO]

Capitulo 16

En la mañana fuimos de compras porque aún nos quedaban un par de días y en la alacena y refrigerador se encontraban vacíos. Solo hicimos compras para dos días, ya que pasado mañana salían nuestros vuelos y agradecía que los moretones ya casi desaparecían de mi piel. Nos decidimos por ir a Walmart por dos simples razones, allí vendían de todo y era el que se encontraba más cerca de casa. Mis amigos frecuentaban mucho estos días por casa, ya que eran los últimos que quedaban, hoy había noche de películas por lo tanto Matt, Rose y amigos de Jeha irían a cenar.

- ¿Estas preparada para dejar el lugar donde creciste? – Pregunto Ross con un cuenco lleno de papas fritas.

- Realmente no, creo que nadie esta preparado ni para perder a alguien a quien quiere y menos para dejar el país donde creció y a sus amigos.

- Supongo que Ann aun no te dice a donde van a mudarse –

- Según ella aun faltan unas cosas para terminar y que cuando este todo listo, nos lo diría. Así que, no puedo armar bien mis maletas porque no se si a donde vamos hará mas frio o demasiado calor.

Si, tenía un estrés gracias a eso, pero puedo comprar lo que sea que necesite una vez estando allá. Tenia tiempo para pensar ya que primero estaría en casa de mi padre

- ¿Qué vemos? – pregunto Kevin buscando una película

- Host – dijeron todos al unisonó

Odiaba con todo mi ser ver estas películas, hacían que después de que terminasen no pueda pegar un ojo en toda la noche y que viera cosas donde no las hay ¿O tal vez si las había y yo engañaba a mi cerebro diciendo que no?

 Un poco más y me subía a las piernas de Matt del miedo que tenía. La película casi está terminando y la mayor parte me la pase tapando mis ojos, no era nada buena para ver estas clases de películas. Una vez que comenzó a parecer el nombre del reparto, prendieron las luces de inmediato, y como era de esperarse, era la única con cara de haber visto al mismísimo diablo frente de mí.

- Apenas son las 01:00 am.- dijo Arnold dándose un estirón en el sofa

- Tengo dos opciones - hablo Rabie – una fiesta en la playa, abra muchas chicas – dijo levantando sus cejas – alcohol, música y lo mejor de todo es que la noche esta especial para estar allí, frente de la fogata, con el mar alrededor y una botella de cerveza en las manos.

Sonaba tentadora la propuesta, pero de lo que estaba segura es que mis ganas de quedarme en casa hasta el día del vuelo eran mucho más grandes que la de salir y que algo mucho más grave me pasara.

- Esta noche no saldremos de esta casa – habló Jeha, mirándome – Con Bella, no saldremos.

- Entonces esto nos lleva a la última opción, el juego de la botella – habló meneando la botella de cerveza casi vacía que tenía en las manos

Siempre son los mismos juegos, los mismos planes. Nadie daba ideas de que hacer para pasar el aburrimiento

- Entonces el juego de la botella será – dijo Cameron – pero cambiemos las reglas esta vez, al que sea que le toque, tendrá que elegir entre verdad o reto y el que no quiera hacerlo tendrá que dar una prenda – dijo

Hacer esto no era nada nuevo, no me quejaría si tenía que sacar alguna pieza de ropa. Podía hacer de cuenta que estaba en la piscina y en traje de baño.

El juego comenzó con Arnold girando la botella, todos miraban como esta daba vueltas cada vez más lento hasta que se detuvo en una persona. Todos levantamos la vista hacia donde apuntaba el pico de la botella. Cam fue el elegido.

- Verdad o reto amigo – dijo Arnold restregándose las manos

- Reto – respondió sin siquiera detenerse a pensar un segundo

- En tres papelitos pondré tres números y se los pondré detrás de cada uno. Nadie sabrá a quien le tocó y tú, mi querido amigo, debes elegir un número del uno al tres y darle un beso que dure al menos cinco segundos. 

 ¿Si esto me ponía nerviosa? Obviamente. No quería besar a nadie esta noche y mucho menos a los que conformaban el equipo de futbol del instituto, hacer eso haría que se generen aun más rumores sobre mi. 

 Muchas vueltas más tardes y la botella solo me eligió una vez. Kevin me había dado el reto de salir en bikini al porche de la casa y contar hasta 100 ¿El problema? Allí fuera hacia demasiado frio, si no morí la noche anterior por un depravado, estaba a nada de hacerlo ahora congelada.

Matt se había quejado sobre el reto infantil que me habían dado, dijo que estaba medicándome y lo único que iba a lograr era enfermarme más tarde. Todos se rieron de Matt menos Jeha. Había notado como se me quedaba viendo por unos segundos o como se molestaba cuando Matt simplemente se acercaba.

Un rato antes de empezar el juego a mi amigo se le metió una pestaña a su ojo y como es costumbre, me pidió que se la sacara, a Ross no solía pedirle este tipo de cosas porque "Quería seguir jugando futbol con la visión en ambos ojos", cada vez que nos lo recordaba hacia que estos dos tuvieran una discusión y a Rosé corriendo detrás de él para poder pegarle.

En los últimos días, aun cuando nos encontrábamos peleados podía notar que algo había cambiado en nosotros, nuestra relación ya no se basaba en insultos y bromas pesadas, ahora veía cosas diferentes.

El juego acabo con mi mejor amiga enojada porque según ella su ultimo reto fue tomar un zumo de todo, si hubiera estado en su lugar hubiera preferido sacarme el sostén antes de hacer pasa eso por mi garganta.

- Debes ir a dormir – dijo Jeha entrando a la cocina con los envoltorios de lo que habíamos comido para tirarlos en la basura

- Si, pero no podemos dejar a estos simios solos porque volverán en nada mi casa – dije escuchando los gritos que provenían desde el comedor

- No te preocupes, yo me hago cargo que esos simios no destruyan tu casa

Me quede unos segundos observándolo, y es no puedo creer lo hermoso que este simio era. Su cabello, sus ojos, su nariz, su boca.

- ¿Qué pasó? – pregunto sonriendo

Y esa sonrisa que hacia que muchas chicas quedaran en el suelo con solo verla.

No sabía el por qué, pero tenía ganas de hacer algo que siempre dije que no haría, o por lo menos con él.

Me acerque de a poco hasta donde el se encontraba, me quede parada mirándolo de cerca. Jeha me llevaba como una cabeza y media más de altura, pero eso no iba a impedir que pasara lo que tenía que pasar.

- Bella – dijo

Creo que quería decirme algo pero no lo dejo, lo tome de su rostro con suavidad para dejarlo a mi misma altura y les puedo asegurar que un rato después, voy a arrepentirme de lo que estoy haciendo.

Si, lo besé.

Este no era como el de la ultima vez, era más como mostrando las ganas que ambos teníamos de hacer esto. Me tomo de la cintura con sus manos para acercar mi cuerpo al suyo y al sentir su tacto en mi piel hizo que saliera un pequeño gemido desde mi garganta. Al parecer escuchar eso le había gustado porque intensifico aun mas nuestro beso, por mi cabeza pasaba que el haría algo más conmigo, pero me sorprendí al ver que sus manos no bajaban de donde las tenía. Comenzamos a separarnos por falta de aire, pero no nos despegamos del todo.

- ¿Por qué fue? – pregunto dándome un tierno beso en la frente

- No preguntes - respondí