Después de que mi madre nos perdonara a mi y al señor Alexander por jugar con cosas del matrimonio, volvió a tomar café conmigo en casa del señor Alexander. Ya le propuse al señor Alexander que lo hagamos de nuevo para que se enoje y nos deje en paz otra temporada.
Mi madre se pasa aquí toda la mañana, viene temprano a desayunar y se queda a comer, si no es porque a esa hora las niñas llegan, se queda todo el día.
Mi madre me había hecho una cita con Marcos, un curandero. Pero mi madre insistía en que le dijera doctor y que al menos así pudiera casarme con un “doctor"
—¿Cómo te fue ayer? — Mi madre le había pedido a Andrés hacerle un pastel.
— Pues me fue bien.
—¿Bien? Val, saliste con un doctor ¿y sólo te fue bien?
—Mamá, es un curandero. — Le recordé.
—¿Y? Aún así puedes hacer reservación como Doctor y señora. — Se tomaba el chocolate como si fuera agua, parecía que no le importaba que estuviera hirviendo.
—¡Mamá! ¡No salí con él!
—¿Por qué? ¿Qué le hiciste? — Se enfadó.
—¿Yo?
—Sí, ¿Por qué canceló la cita?
—No, mamá. Yo cancele la cita. — Me cubrí el rostro esperando un golpe.
—¿¡Qué hiciste qué!? ¿Por qué? — Se puso muy mal.
—Porque las niñas me necesitaban. — Admití.
—¡Val! ¡Te obsesiona estas personas! ¿Cuándo tendrás una vida propia?
—Mamá, ellas me necesitan.
—¡Pero debes hacer algo! ¡Ellas crecerán! — Me gritaba como si yo fuera una idiota y no comprendiera su punto.
—Mamá — Traté de controlarme. — Quería que fuera una sorpresa, pero debo contarte que conocí a alguien. — Sonreí.
—¿Qué? — Se le iluminó el rostro.
—Sí, es un bancario.
—¡Oh por dios!
—Es millonario, soltero y tiene un gran puesto. — Sonreía mientras le contaba a mi madre. —El único defecto es que debo de firmar un prenupcial.
—¡¿Qué?! — Mi madre se puso pálida.
—Lo sé. — Suspiré.
Todo iba perfecto con León, nos conocimos porque es un socio y amigo del señor Alexander, salimos durante varios meses, dijo que era el amor de su vida. Cuando me propuso matrimonio y le dije que sí, sacó de debajo de la mesa un acuerdo prenupcial, la forma menos romántica de todo.
—De acuerdo, Val. — Se puso de pie. — Vive sola, no te cases, pero cuando tengas que comer sola y no tengas con quién hacer el amor, te acordarás de mí y de lo que te dije hoy.
Se dirigió a la puerta y la azotó cuando salió.
Creo que está exagerando, tengo 29 años y aunque en unos meses cumpla los 30, no significa que ya no encuentre a alguien. Michelle tiene 16, Adela tiene 10 y… ¡Michelle tiene 16!
Si mis cálculos no fallan, en menos de dos años ella será mayor de edad y mis servicios serán nulos aquí.
Aunque por otro lado, a Adela aún le faltan 8 años y…
Mis pensamientos fueron interrumpidos por la puerta, corrí a abrirla y Lau estaba ahí. Desde que tiene nuevo empleo no nos hemos visto mucho, trabaja siendo botarga.
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Mi bella niñera.
FanfictionValeria se ha ganado el corazón de toda la familia y quiere volver a su lado por la gran revelación que ha tenido Alexander Maldonado en el asalto al banco. ¿Podrá superar los nuevos retos que se le enfrenten? ¿Tomará la decisión correcta? ¿Se casa...