OMEGAVERSE® KOOKMIN

O9.

—¿Qué fue lo que paso?—Pregunte.

—La historia es larga...

Flashback.

—¿Quieres que te ayude en tu celo?, Tata—Hablé con una sonrisa burlona en mi rostro.

—¿Qué haz dicho?—Comenzó a gruñir acercandose a mi.

—Oh vamos Tata, ¿No quieres que te muerda?.

Se acerco y me empujo contra la puerta.

—Escúchame bien, no me gustas idiota no me molestes, y no juegues con eso retrasado—Gruño y me tomo del cabello haciendo que lo mirara.

—Tata—Reí.

—Eres un completo idiota—Gruño sacando sus dientes y mostrando sus garras con las cuales se clavaron en mi brazo.

—Así que eres de los salvajes, me gusta—Dije tratando de no pensar en la probablemente cicatriz de mi brazo.—¿Te pongo nervioso?—Coloque mi mano en su mejilla y lo mire a los ojos.

—¡Cállate!—Gruño.

—Cállame— Y sentí como estampó sus labios con los míos.

Besaba bien, tenia carnosos labios y aunque estaban un poco resecos, era el mejor beso que tengo hasta ahora.

Baje mis manos a su cintura y lo atraje más a mi haciendo que por inercia colocara sus brazos en mi cuello. Aproveche el jadeo que dio para meter mi lengua la cual se encontró con la suya en una húmeda danza.

—Ah~ —Gimió en mi oreja, mordiéndola.

Sabia que era por que estaba en celo, cuando omegas y betas estamos en celo nos volvemos más cariñosos de lo normal.

Me tomo de las mejillas juntando otra vez nuestros labios, pero en un beso mucho más hambriento. Baje mis manos hacia su trasero y lo apreté ganando un gemido por parte de él.

Pensé que el trasero de Jimin era el único grande y redondo, me equivoque.

Tome su trasero haciendo que saltara y enredara sus piernas en mi cintura. Abrí la puerta como pude y me adentre a la casa.

Lo coloque en el sofá mientras subía su camiseta dejando ver unos -ya erectos- pezones, los cuales lamí y mordisquee a mi gusto escuchando de fondo sus gemidos.
Saque completamente su camiseta y baje dejando besos en su cuello.

— Hyung~ nhg~

Tomo mi cabello haciendo que alzara mi cabeza para juntar sus labios con los míos, baje mis manos a sus pantalones los cuales saqué con su ayuda. Y cuando quise hacer lo mismo con su bóxer me empujo gruñendo.

—¡Suéltame!—Gritó para después irse a la que supongo es la habitación de Jimin.

¿Que carajos?

Fin.

—Oh, ¿Tae esta arriba?—Pregunto Jimin preocupado.

—Sí y desde hace horas esta metido allí.

—Iré a hablar con él, debe de sentirse mal—Nos miro a mi y a Jungkook .—Mientras ustedes supongo que tendrán muchas cosas que resolver—Dijo para después subir las escaleras.

Jimin.

¿Sí me sentía normal dejando a Hyung con Hobi? Hpues sinceramente no. No puedo decir que confío en Hyung, le quiero sí, pero no lo conozco mucho. Puedo ser muy tímido y distraído pero para unas cosas soy muy serio.

Toque la puerta pero nadie respondió.

—Tae, soy Jimin abr...-Solo sentí como un brazo me jalaba adentro de la habitación.—¡Tae! Me asustaste, tonto—Hice puchero mirándolo.

—Lo siento, Jimin—Suspiró.—Supongo que ya lo sabes ¿No?

—Nope, Hoseok hyung no me dijo nada, dijo que no le correspondía—Me senté como indio en la cama y Tae hizo lo mismo.

—Bueno, eh ¿Cómo lo puedo decir? Y-yo est-toy en ce-elo—Tartamudeo y bajo la cabeza tratando de esconder su sonrojo.

—Oh Tae, ya lo sabía tu olor es ligeramente dulce—Sonreí haciendo que se sonrojara más.

—Yah, bueno tu me llamaste para que valla a tu casa, diciendo que necesitabas ayuda con algo—Me miro mal.—Pero resulto que era Hoseok y como sabes que es mi persona favorita en el planeta me hiciste venir a hablar con él—Gruño.

—Pero lo que hicieron no era hablar específicamente—Lo mire encarnando mis cejas.

—¡Jimin!—Chilló.—¿Donde quedo tu inocencia?

–En la cabaña de Jungkook Hyung...—Murmuré.

—¿Qué?

—Nada, nada. Bueno ya me imagino lo que hiciste con Hobi, pero ¿Qué es lo que paso? ¿Porqué te cae mal?

—E-eh...—Suspiro y me miro.—¿Recuerdas
cuando me presentaste a Hoseok?—Asentí.—Hoseok era muy pegado a ti toda la semana que estuvo aquí, y pues en ese entonces y-yo...

—Estabas enamorado de mi—Complete sonriendo.

—Abrió sus ojos.—¿Q-QUE? Tú... ¿Sabias?

—Tae, no soy tonto—Sonreí y acaricie su mejilla.—Lo sabía, Ademas ¿Quién no lo estaría?

—Creo que andar con tu alfa idiota te está afectando—Bufo.

—¡No hables así de Hyung! eras muy obvio—Reí.—Querías que fuera beta a toda costa.

—Se sonrojo.—¡Cállate!

—Y recuerdas la vez en la que un alfa se me acerco y...-Sentí como se subió encima mío.

—¡Cállate, cállate, cállate!

—Pero mira tus cachetitos—Canturree.

—Pero mira los tuyos—Hablo para jalarlos.

—Tata suelt-

—Jimin, Hoseok dice que...—Nos miro y lo único que hizo fue irse azotando la puerta.

Bien hecho Jimin.