Idiota - Fack

Capitulo 11

Mierda.
Lo admiraba, admiraba su belleza, la galaxia de pecas que tenia en su rostro, sus mejillas siempre sonrojadas, sus largas pestañas, su alborotado pelo, y su sonrisa, Mierda. Su maldita  sonrisa  totalmente hermosa.

Estaba disfrutando de una obra de arte frente a mis ojos, Finn.

El sol le chocaba contra la cara, el cerraba sus ojos, dejando asi que sus largas pestañas resalten sobre sus mejillas, estaba sentado en el piso y apollados con sus manos, y tirando levemente la cabeza para atras, yo estaba a su costado, no queria hablar, solo mirarlo y guardarme este momento en mi cabeza.

-Puedes tomarme una foto si quieres.- dijo abriendo un ojo solo y mirándome con una sonrisa pícara.

-¿Qué?¿De que hablas?- me hice el tonto, realmente ya me estaba empezando a sonrojar.

-Desde que vinimos no paras de mirarme como un completo psicópata-hablo recuperandose y sentándose con sus rodillas a la altura de su pecho y sus manos sujetando estas mismas.

-Eso es mentira-mentí.

-Eso es verdad, Jack- y sonrió Oh, basta por Dios deja de sonreír.

-Eres horrible- volvi a mentir, ya me estaba poniendo nervioso.

-Ah si?-. Jugó

-Si, y aparte idiota-.

-Y te gusto asi de idiota y horrible- dijo mirando al frente.

-Que egocéntrico eres, no me gustas, idiota- eso me queria hacer creer  yo mismo, Finn wolfhard no me gusta, lo odio.

-Que lástima, porque tu a mí si- dijo mirándome a los ojos.

¿Que? ¿Escuché bien?¿Yo gustarle a Finn Wolfhard? JAJAJAJAJ NO. eso era imposible el solo estaba jugando conmigo.

-JAJAJAJA- me tente, era mas una risa nerviosa que otra cosa.

-¿De que te ries?- hablo serio y mirándome fijamente a los ojos, con el seño fruncido.
Y me segui riendo.

-De tu pésimo chiste-.

-Estoy hablando en serio Jack,  no estoy jugando.- QUE? Nonono eso era imposible Finn nunca habla en serio, siempre jode, no voy a caer.

-No te creo- confesé.

-Okey me da igual- dijo levantándose.

-¿A donde vas?- lo mire confundido.

-¿Te importa?- respondió de mala ganas sin ni siquiera mirarme, y empezó a caminar.
Rápidamente me levante y lo seguí.

-¿porqué actuas como un niño caprichoso?¿Puedes volver y sentarnos?- hable, casi suspirando siguiendo sus pasos.
El me ignoro y sigo con su caminata.

Apure mis pasos y estire  mis manos queriendo entrelazarlas con las suyas, pero no pude.

El no movio su mano, la dejo estática, no queria entrelazarlas.

-Por favor...- suplique.

El suspiro y entrelazo nuestros dedos mientras giraba para volver.
...