Idiota - Fack

Capítulo 23

Miraba el piso mientras caminaba de la mano de Jack, el era realmente perfecto.
Me gusta todo de el, desde la cabeza hasta sus pies.
Pero yo no estaba seguro, no tenía del todo claro mi orientación sexual¿era gay?¿Que pensarían mi familia?¿mis amigos?
Estaba confundido.

¿como este ser tan lleno de luz podría meterse con una oscuridad como yo?

El claramente no me merecía,¿pero cómo hago para alejarme? Si es el el motivo de mis alegrías...

En serio, tenía que alejarme de el, o sino iba a destruirlo.

-¿En qué piensas?- esa dulce voz, hizo que salga de mis pensamientos erróneos.

-En nada, mi amor- trate de afirmar, aunque se notaba que pensaba en absolutamente TODO.

-Tengo una idea-hablo entusiasmado.

-Dime..

-¡Vamos a la playa!-Grito con una gran sonrisa en la cara.

-¿Y si mejor volvemos a casa, compramos helado y nos acostamos a ver tu serie favorita mientras te doy besitos?- frene mi caminata para poder darle un beso.

-La playa suena más divertido, no habrá nadie- hablo el pequeño mirándome fijamente a los ojos.

-En tu habitación tampoco habrá nadie, es una propuesta genial, y de paso podrías chuparmela-.

-¡Finn! Siempre eres el mismo cerdo- rápidamente se separo de mi y comenzó a caminar adelante, dejándome sólo a mi.

-Dale amor, te enojes, era sólo un chiste- le grite mientras daba grandes pasos para agarrarlo.

-No me enojo.... pero sólo si vamos a la playa- nuevamente me miró a los ojos e hizo pucherito con sus labios.

¿Cómo resistirme a semejante belleza?

-ahggg esta bien, tu te pierdes mis besos -dije para tomarle la mano para poder así  dirigirnos al lugar anteriormente  nombrado.

-¡Pero lo más importante es que no me pierdo el helado!- grito emocionado con una gran burla en su tono de voz.

-Oh si, claro que si, no seguiste con mi plan, ahora te quedaste sin helado también- Levante las cejas y vi como rápidamente fruncio las cejas, sonrió y se acercó a mi oído.

-Una lástima, yo te iba hacer eso que ti me habías pedido cuando  regresemos, pero te quedaste sin tu mamada mi amor- susurro el castaño en mi oido para  luego alejarse giñarme el ojo y regalarme una sonrisa  pícara.

-¡Mierda, A comprar helados se ha dicho!- hablé.

. .
holaaa
Que les gustaría que pasé?