Mas alla de tu orgullo

TIEMPOS DIFICILES

ETHAN

Estuve dos semanas fuera de Brooklyn, acompañando al idiota de Black a sus reuniones de negocios, nos habiamos quedado en la estancia de un amigo suyo el cual no me inspiraba para nada confianza.
Los rusos estaban escondidos tras el golpe que le habíamos dado, la deuda con la que quedaron por haber perdido el cargamento había sido más grande de lo que tenía en mente.
Tal como lo sé lo dije a Mel iba a entregarlo. A Black no le afecto en nada ya que de cualquier manera iba a desacerse de el para evitar cualquier sospecha en su contra. Su único motivo era hacerlos salir del negocio. Fue demasiado rápido su ascenso tanto que se expandió en tres ciudades vecinas en dos semanas. Mí reporte con el jefe de operaciones era diaria, el bastardo de Black me informaba hasta cuando iba a orinar. Lo que complacia a mis jefes pero me torturaba ami sabiendo que al llegar pasaría días realizando mí informe.
La señal era escasa lo que imposibilitó que me comunique con Mel, nisiquiera pude despedirme solo le envié un msj avisándole que estaría fuera por un par de días. Demás está decir que tendré que enfrentar a la bestia cuando regrese.
Nuestros horarios casi no coincidían y para no estar tanto tiempo separados siempre uno de los dos iba a dormir a la casa del otro. Al principio creí que sería más fácil una relación así, pero la verdad es que lleva una gran fuerza de voluntad de ambas partes. Necesito hablarle saber cómo le está llendo y que sepa cómo estoy yo... Demonios la necesito.

-Black debemos volver.

-de que cojones hablas? Estamos a un paso de cerrar trato con estos idiotas, aún no podemos regresar.

-olle amigo tu no entiendes, también tienes negocios en Brooklyn y no vas a ganarte el puto respeto si no dejas de lamerles las bolas a estos sujetos. Ya les ofreciste tu mercancía. Haste el difícil al menos un poco para que ellos te vallan a buscar, lo que tienes es bueno, sino lo quieren otros lo harán.

- ok, vez porque te necesito como mano derecha, tienes ese don para los negocios maldito. Vamos a empacar llevo duro dos semanas mis nenas me esperan.

Asiento y voy a mí habitación a guardar mis cosas. Enciendo mí radio para avisar a la base que estamos por salir y la vuelvo a guardar entre mí ropa.

Llegó a la ciudad y lo primero que hago es poner mí móvil a cargar y llamar a Mel, intento dos veces comunicarme pero me da el contestador. Tomo las llave del auto y voy a su casa pero no hay nadie. Me dirijo al hospital y cuando llegó al lugar me encuentro con una mierda de escena.
Mí novia, mí mujer abrazada con el idiota del médico con el que salía, siento la furia recorrer mí cuerpo y sin esperar más me bajo del auto.

Mis pies parecen estar suspendidos en el aire por la velocidad que llevo. Sin mediar palabra alguna tomo a mel del brazo y la empujó a un lado, y en cuestión de segundos mí puño impacta en la boca del imbesil.

-pero y a ti que mierda te pasa, estas loco sueltalo Ethan

- te dije que te mantuvieras lejos, no te le vuelvas a acercar hijo de una gran puta voy a matarte si te veo cerca otra vez.

Se pone de pie escupiendo la sangre de su boca y mira a Mel antes de hablar.

- ni tú ni nadie va a prohibirme que esté a su lado cuando ella me necesite Haste la idea. Dónde mierda estabas tú cuando se suponía que tendrías que estar para apoyarla- quedó intercambiado miradas entre el y ella sin entender nada. Me acerco despacio a Mel pero nisiquiera me mira- debo irme Mel cualquier cosa solo llámame si.

Y es ahí donde me detengo a mirar a mí alrededor, está su maleta y una carpeta con papeles ensima.

- bonita que paso, lo siento acabo de llegar y no había tenido señal.- me quiero acercar pero se aleja y toma sus pertenencias para subir al taxi que lleva mirando la situación hace rato.
La tomo de la mano pero da un manotazo y me mira de reojo.- Mel háblame no te vallas asi que ocurre a dónde te vas.