Deal - Kim Nam Joon

Happend

Sentía que estaba yendo en contra de su voluntad con todo esto. El pensar en que su mejor amigo en realidad estaba vivo le ilusionaba grandemente y le había quitado un gran peso de encima, pero ahora la idea de que este ya no lo recordaba y era un asesino serial presunto a matarlo en el mismo momento en que lo encontrara, lo tenía nervioso.

Seok Jin lo convenció hasta los tuétanos de que ellos no eran una organización como las demás. Le decía que más bien se encargaban de proteger su zona en Daegu, formaban alianzas con los otros Clanes, pero que su principal objetivo durante mucho tiempo era derrocar el poder político en el que estaba oprimida la sociedad. Un poder que más bien era dañino porque estaba destruyendo vidas para estar allí. Porque estaba utilizando personas como títeres para hacer lo que ellos querían. Le contó lo que había planeado desde un principio hacer con Yoon Gi, el cambio de sus ideales con respecto al deseo de JungKook por sacarlo del letargo en el que vivía su amigo. Cosa que Nam Joon no había podido hacer.

Ahora entendía muchas cosas de la sociedad y la vida. Ahora podía ver a personas como Seok Jin con diferentes ojos. Él trataba de sacar a jóvenes marginados y sumidos en las drogas, en la pobreza o las pandillas, para hacerlos parte de aquel lugar en el que vivían. No era el mejor camino que podría desear para alguien, porque de igual manera hacían cosas ilegales, pero al menos agradecía que una persona de tantas en el mundo pensara diferente y actuará al respecto.

Eso le dio esperanzas para poder hacer algo en un futuro. El mundo está tan lleno de egoísmo, gente que busca ser famoso y ganar mucho dinero, mientras tantos chicos con sueños, con deseos de sobrevivir y de despertar vivos al menos un día más, viven en las peores condiciones. Estaba empezando a conocer ese lado del mundo tan oscuro, donde habían tantas personas más sufridas que él incluso. Que trataban día a día de levantarse y al menos mirar el sol y dar gracias por ello.

Dejó la pistola recién armada sobre la mesa, tratando de recordar nuevamente el nombre de cada parte y dónde colocarlas. No se sentía muy seguro con estar manipulando ese tipo de armas, tenia miedo de cometer un accidente, pero Seok Jin insistía en que debía hacerlo. Ya llevaba unos meses allí. Aún no podía manipular el objeto a la perfección, a veces le temblaba la mano, lo que le hacía sostener con ambas.

Es cuestión de práctica.

Había dicho Seok Jin con una risa burlona en su rostro. Si claro. Él estaba empezando a odiar ese tipo de cosas, pero mejor las había preferido antes que tomar una daga o navaja en las manos. Sentía pánico de esas cosas y se imaginaba específicamente por que.

Le habían quitado el deseo de verse al espejo. Su rostro había quedado con una cicatriz horrible que le hacía sentir escalofríos y más que eso asco al mirarse.

Apartó el pensamiento cuando escucho unos pasos acercarse y un chico de cabello castaño entrar con un leve cojeo.

—¿Has visto a Seok Jin por aquí?— preguntó este con una ceja enarcada, mientras se pasaba las manos por el cabello inquieto.

—No.— respondió. Ese tenía que ser el tal Jackson Wang Su Clan estaba ubicado en la parte norte de Daegu. Según sabía, era un gran aliado desde hace un tiempo y aunque era un rebelde empedernido con aires locos, también era un fiel camarada, pero ahora que se fijaba bien; Era el mismo que conoció cuando estuvo en Busán. Él fue quien lo llamó para socorrer a Ho Seok.

—Necesito encontrarlo. Le dije a ese idiota que él imbécil de Min Yoon Gi terminaría traicionándolo.— bufó el chico, caminando de un lado a otro. Sacó un paquete de gomitas del bolsillo para abrirlo con premura y llevarlas a su boca en grandes cantidades, le extendió al moreno, que se negó.

—¿Min Yoon Gi? ¿Lo viste?— preguntó para confirmar sus palabras.

—Si, me topé con ese mal nacido. Al parecer está con Key y no creo que están planeando cosas buenas... ¡Rayos! ¡Seok Jin!— gritó el castaño, saliendo del lugar para dirigirse al despacho del mayor.

Nam Joon no comprendía quien era el tal Key, pero por la actitud que llevaba Jackson estaba llegando a pensar que no era nada bonito lo que estaba pensando y que él mencionado era algún enemigo. Por nada iba a llegar así de alterado, parecía volverse loco con todo aquello.


***


—No quiero vacilación en esto, así que decido enviar a Suga a está misión.— indicó el hombre observando a los dos sujetos, hombre y mujer, delante suyo.

—¿No te parece que estas muy preferencial en estos días?— expresó uno de los que ocupaba la sala.

—Claro que no. Solo quiero asegurarme de que el trabajo sea hecho a la perfección. Después de lo sucedido con Dae Hye no quiero arriesgar que una misión sea fallida.

—¿Qué te garantiza que lo sea? Sabes muy bien que ese muchacho es un artista con respecto a la estrategia y no me imagino lo que tenga planeado.

—Ja, Suga es bastante bueno como para saber a lo que se enfrenta, ¿verdad?— cuestionó el hombre, extendiendo sus ojos en el rubio y alzando su pierna para colocarla sobre la otra. El mencionado asintió.

—Se que ese niño es el hijo que tanto Park ocultó y es al que necesitamos. No me importa las cabezas que tengas que arrancar para traérmelo.— murmuro el mayor.

Del otro lado de la estancia, Key con un cigarro entre los labios, bufaba. De verdad que no conocían a Seok Jin. Él no era uno de los mejores, pero su maestría y equipo eran excepcionales. Soltó el aire suavemente, reteniendo una carcajada. Esperaba que esto no se le saliera Lee de las manos. Porque si pasaba lo del efecto rebote con aquel Assasin, no sería nada bueno.

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Espero me hayan extrañado.

Aunque los capítulos son cortos la historia está llevando su curso.

Gracias mil veces más por su apoyo. A mis lectores fantasmas Boys or Girls les dedico este cap.

Anunció que estaré publicando las historias de Boy Meets Evil en Sweek también para que me apoyen en esta aplicación.