Fourteen.

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Evan.—

Viernes en la noche. James y yo estamos esperando a Malcom en nuestro bar favorito. El maldito aún no aparece, lleva diez minutos de retraso. James y yo ya estamos planeando como ir a buscarlo y de donde sacar una soga para dejarlo atado a un poste de luz.

—No va a venir ¿Cierto?

—Qué idiota es, sabe que cumpliremos con la apuesta.—niega James tomándose la frente.

—Le demos un rato más, está haciendo un gran esfuerzo... creo.

—¿Cómo te ha ido con ese tarado?

—Bien. Mejor de lo que esperaba.—sonrío.

—Cuéntame hombre.

—Fuimos a cenar y por casualidad él estaba en el mismo bar... ¿Sabes? Pienso que anda rastreandonos, siempre aparece en el momento menos indicado. Lo ignoré como me sugeriste. Julia se quedó más tranquila y dejó de preocuparse. Pero ayer...

—Ayer qué.

—Ayer estaba saliendo de una clase y me lo encontré en los pasillos. Al parecer no tiene nada que hacer...

—Es raro.

Asiento.— se acercó a saludarme y quiso dar tema con que él era amante de Julia y que tuvieron un amor muy fuerte hace tiempo.

—Dime que seguiste el segundo  consejo.—junta sus manos en plegaria.

—Claro. Me reí en su cara... le dije que ya sabía todo, que Julia me lo había contado y que la verdad no había problema porque Julia me ama a mí y la verdad estamos muy felices.

—Vaya... qué sorpresa.

—Eso si, me trague las ganas de decirle en la cara que conmigo la pasa mejor que nunca en la cama, pero quedaba un poco feo.

—Todo un caballero Stone, estoy orgulloso.— da un par de palmadas.

—Gracias... de verdad te lo debo a ti.

—Ahora yo soy el que necesita tu ayuda.

—¿Qué pasó?

—Clarie anda muy rara. No quiere que la toque, no quiere hablar, no quiere salir de su casa. De verdad que no quiero invadir su espacio pero me tiene de los pelos que no me diga que es lo que le pasa.

—ya sabes como son las mujeres... si no quiere que preguntes no lo hagas.

—Lo que sucede es que también soy nuevo en esto de tener novia y además ya sabes como es Clarie y... tampoco quiero perderla me costó sudar sangre convencerla de andar conmigo.

Comienzo a reír.—bueno, lograr que Julia decida quedarse conmigo sabiendo el pedazo de caca que soy no fue pan comido. No sé mucho más del tema que tú... aunque si te recomendaría, conociendo a Clarie, que no te metieras en ese tema, trata de involucrarte pero si te pone límite lo respetas.

—Gracias Bro.

—Hey....— grita Malcom desde la entrada. Se acerca animado y corre una silla para sentarse en nuestra mesa.

—pensábamos en como atarte en el poste.— choco mi mano con la de él.

—Los conozco lo suficiente como para saber que hablan de verdad.

Empezamos a conversar nuestras estupideces cotidianas, la verdad es que hacía un buen tiempo que no compartíamos momentos con Malcom. Tanto fue así que nos la pasamos toda la noche hasta que el bar quiso cerrar sus puertas.

Ya para irnos, seguíamos riendo en la acera afuera del bar.

—Me imagino que nos veremos en la fiesta de Ethan, ¿no?— le pregunto a Malcom.

El sonríe y me da una palmada en el hombro.— pero claro, seguiremos poniéndonos al día.

James carraspea y nos mira arqueando una ceja. — ¿La fiesta de quién?

—Ethan, el primo del Idiota. — le explico.

James comienza a reírse. — ¿Puedo ir con Claire? no me quiero perder la serie de desafortunados acontecimientos.

Río—Claro que podrás ir, pero si esperas ver drama, no creo que lo encuentres esa noche. Por lo menos no conmigo, porque mi cuñado Patrick es el que estará pasando música en la fiesta.

James cambia un poco su cara y mira hacia el suelo. Aún no pueden verse a la cara después de lo de Clarie y ella se pone un poco tensa cuando tienen que encontrarse todos en un lugar o en una reunión. Pero somos todos amigos y somos personas grandes así que tenemos que empezar a comportarnos como adultos y dejar las diferencias a un lado.

—Ni que fuera tan bueno poniendo música...— murmura.

—Según lo último que pude hablar con él es que tiene la oportunidad de comenzar a telonear a otros en algunos festivales de electrónica así que creo que Clarie querrá morirse cuando se entere de que uno de sus ex está en Tomorrowland. — me burlo. 

—Bueno, ya... No lo lamentará tanto cuando una de mis películas gane un Oscar. — dice desafiándome. 

Con las últimas carcajadas comenzamos a despedirnos. Voy subiendo a mi moto cuando un chistido me hace girar a ver. 

Detrás de mi puedo ver a una chica apoyada en la puerta de un auto que estaba estacionado a unos cuantos metros de donde estábamos. Me sonríe y con los dedos dibuja un corazón. Si no me equivoco y la vista no me falla es la camarera que estuvo coqueteando conmigo la otra noche con Marcus y Brad. 

La miro extrañado y enciendo mi moto para arrancar e ir a casa. 

En el camino a casa sigo pensando en como es que me la vuelvo a encontrar y como es que sabía que estaría en ese bar con mis amigos. ¿Estuvo esperándome? ¿Está siguiéndome? Comienzo a preocuparme un poco. Todo puede pasar en este país. 

***

Julia me llama y me pregunta por qué no he ido a dormir con ella en su apartamento. Lo cierto es que después de ver a la camarera pensé que podría seguirme por todos lados, (sí es que no lo hace ya) y robarme o hacerme algo y prefiero que no sepa dónde vive Julia (sí es que no lo sabe ya) y pueda hacerle algo a ella. Le contesto que había dejado unas cosas de mis clases aquí en mi apartamento y que ya era tarde para andar yendo y viniendo con el frío en moto.

Julia me dijo que está bien, pero su tono de voz no era para nada de una novia convencida con la mentira que acaba de decir. Luego me siento mal porque le hice un tremendo escándolo por haberme ocultado lo de Bruno... aunque esto no es nada parecido a lo que pasaba con Bruno ¿o si?

Voy y miro por el balcón un poco preocupado por la situación. Me fijo bien de que no esté ahí abajo también. 

Voy a la cocina y saco una jarra de jugo. Vuelvo al balcón a mirar. Siento el ruido de mi puerta. Alguien la está golpeando.

Voy un poco inseguro hacia ella y espío por la mirilla. No veo  a nadie. 

Carajo. 

Me giro para volver a la sala pero siento el cerrojo girar. Al abrir la puerta veo a Julia entrando con su bolso. 

—No encontraba las llaves. ¿por qué no atendiste la puerta?

Es sólo Julia.

— Estaba saliendo del baño amor. Pero ¿qué estás haciendo aquí?— me acerco y le doy un beso.

—Quería pasar la noche contigo. Estaba con Patrick ayudándole a planear su repertorio y le dije que me dejara aquí.— rodea mi cuello y me mira sonriendo. —¿Esperabas a alguien más?

— Sólo a ti. — me acerco más a sus labios. — Me hace un poco de frío ¿Podríamos ir a la cama?

Ella saca una pequeño sobrecito plateado de su bolsillo trasero y me guiña un ojo.

—Sí, claro. Podemos calentar las cosas.







Regresaras a mis Brazos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora