cinco

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Narra Allie:

"¿Conoces a los vecinos de enfrente?" me pregunta mi madre mientras bajo las escaleras.

"Sí, Michael está en mi curso" le respondo, "¿por qué?"

"Solo me lo preguntaba, vendrán a cenar" me sonríe.

"¿A qué hora?" le pregunto.

"Deberían estar aquí en unos diez minutos" me dice y asiento.

Para ser honesta, me suelo poner nerviosa cuando vienen chicos a casa, independientemente de si me gustan o no. Obviamente no me gusta Michael, raramente he entablado una conversacion con él. Pero admitiré que me resulta interesante, quiero decir, es diferente, cosa que le hace ser interesante.

Corro subiendo las escaleras y pongo mi móvil en el bolsillo, para luego cojer un cepillo y pasarlo por mi pelo castaño claro, coloco mi ropa una última vez ante el espejo y me encamino a las escaleras.

Suena el timbre y corro hacia la puerta para abrirla.

"¡Hola!" digo después de abrir la puerta.

"Hola, tú debes de ser Allie" me sonríe la madre de Michael.

"Oh, sí" digo y me abro paso de la puerta "pasad, por favor."

"Muchas gracias" dice ella dando unos pasos hacia el interior de la casa, "este es Michael."

"Sí, ya le conozco, somos compañeros de laboratorio" le digo.

"¡Mikey! ¡No me has dicho eso!" le dice ella, mientras Michael rueda los ojos. "De todas formas, me llamo Karen, llamame así, ¿de acuerdo? Nada de «Señora Clifford», por favor."

"De acuerdo" le sonrío. "¡Mamá, ven, ya han llegado!"

"Oh, hola" mi madre sale por fin de la cocina.

"Hola, Eve" Karen le sonríe a mi madre y luego mira Michael. "Voy a ayudar a Eve en la cocina, ¿de acuerdo, Mike?"

Michael asiente en respuesta.

Mi madre se dió la vuelta para mirarme. "¿Qué tal si vais a tu habitación? Pero no os divirtáis demasiado." Me guiñó un ojo y empezó a reírse.

"Ugh, mamá." Gruñí, pero ella solo se rió y fué con Karen a la cocina. "Hm... Así que... ¿quieres ir a mi habitación?" Michael se encogió de hombros y yo reí levemente e hice un gesto para que me siguiera. "Encenderé la radio, ¿bien?" dije una vez arriba, sonriendole, de lo que obtuve un asentimiento y una leve sonrisa por su parte.

Michael parece extremadamente nervioso cuando se sienta en una silla que hay en mi habitación, está medio-tiritando y mira a todos los rincones de la habitación.

"Michael, tranquilo, no voy a hacerte daño." Le sonrío. "¿Vas a hablar?" Le pregunto mientras cambio de frecuencia de radio.

"Tal vez." Le escucho hablar y levanto la vista para ver que está sonriendo.

"Bien, ¿no está alguien siendo algo descarado?" Me río, también hago que él suelte una pequeña risa, y me siento en mi cama. "¿Cómo estás?"

"Bien, ¿que tal tú?" Ugh, esa es exactamente la misma respuesta que me dió ayer mientras volvíamos de la escuela.

"La verdad, estoy muy bien, me estoy acostumbrando a este lugar." Le digo, "¿pero por qué estás solo bien?"

"Siempre estoy solo bien." Se encoje de hombros, lo que me hace suspirar frustrada.

"Michael, ¿estás asustado de mí?" Le pregunto.

Él mira hacia arriba un poco impresionado por la pregunta. "No." Responde finalmente, lleno de razón.

"¿Crees que voy a hacerte daño?"

"No."

"¿Soy odiosa o molesta?"

"No."

"¿Entonces por qué siempre estás tan asustado y nervioso a mi alrededor?"

Me mira con los ojos bien abiertos y luego dirige sus ojos alrededor de la habitación. Lentamente relaja sus fracciones. "No soy bueno haciendo amigos."

"Bueno, no importa, pareces un buen chico."

La cena no fué tan incómoda como lo esperaba, mientras que Michael es muy callado y tímido Karen es todo lo contrario. Se estaba riendo y hablando constantemente, cosa que realmente me gustaba. Se nota que sería una buena amiga para mi madre. Desearía poder decir lo mismo para Michael y yo.

De verdad quería ser su amiga, parecía que el necesitaba una, pero parece que no quiere permitirme serlo.

Algo no está bien con él.

hospital of souls | m.c.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora