SUSAN P.O.V.
-Su, despierta, ya llegamos- escuché la voz de Alessandro; en algún punto del camino me había quedado dormida, fuí abriendo los ojos lentamente, pude ver el cielo que empezaba a oscurecer
-¡Miren ya llegó el "Pilón"!- escuché la voz de una mujer
-Muy graciosa Lucy- dijo mi novio sarcásticamente, me estiré en mi asiento y luego abrí la puerta para salir del auto
-Hola Susan- dijo la recién casada mientras se acercaba a saludarme
-Hola- dije después de darle un beso en la mejilla
-¿Qué tal viaje?-
-Tranquilo, supongo- dije mientras buscaba con la mirada a mi novio
-Esta en su cuarto acomodando las maletas, no quizo despertarte hasta que bajara todo el equipaje- respondió a mi pregunta no formulada (y que ni siquiera fué pensada), sonrió -te llevaré al cuarto, sigueme-
-Gracias- sonreí
Cuando levanté mi vista me topé con una mansión, por que realmente eso era lo que tenía frente a mí: una casa de dos pisos, en el segundo estaba la terraza, junto a las escaleras de entrada había dos piscinas, una a raz de suelo y la otra más elevada, tenía grandes ventanales y una palapa al costado
-Muy lujosa ¿no crees?- dijo Rachel sacándome de mis pensamientos
-Hm si, eso parece- sonreí
-No es a lo que estoy acostumbrada, pero fue un regalo- dijo mientras atravesabamos un pasillo en dirección a una puerta
-Está es su habitaciòn- era una habitación amplia, había una cama King Size, y frente a ella grandes ventanas las cuales mostraban un balcón que daba vista al mar y a mi novio recargado en éste -los dejo para que se instalen- dijo para después salir y cerrar la puerta tras de sí
-Muy bello- dijo al sentir mi prescencia junto a él
-Si, pero como dijo tu hermana, no estoy acostumbrada a estos lujos- dije encogiendome de hombros
-Bueno eso me alegra, porque nuestra casa no será así,- lo miré asombrada, ¿nuestra?, -un maestro no gana tanto- dijo sonriendo al horizonte
-Dijiste ¿nuestra?- preguntè
-Oigan la cena está lista- dijo una de sus hermanas antes de que pudiera contestarme
-Vamos- dijo tomándome de la mano y entrelazando nuestros dedos
...
ALESSANDRO P.O.V.
-Dime cuñadito, ¿qué tal tu nuevo trabajo?- preguntò el esposo de Rachel
-Bueno, no me puedo quejar, hasta ahora todo va bien-
-Y que tal tus alumnas, ¿están buenas?- dijo el novio de Lucy, el cual fue receptor de un zape
-Estoy presente y su novia también- dijo mi hermana molesta
-Sòlo era una broma- se justificó
-Bueno, la verdad, no hay chicas "buenas"- dije haciendo comillas en el aire -dejé de apreciar lo superficial y aprendí a apreciar los sentimientos e inteligencia de las personas, aprendí que el interior es lo más importante- dije mirando a Susan, la cual como siempre se sonrojò, a lo que besé su frente como ahora acostumbraba hacer cada vez que el calor subía a sus mejillas
-Ay que romántico "Pilón"- dijo Rachel
-Pero tu novia no es fea- habló el novio de Lucy rompiendo el momento
-Deja tus comentarios estupidos y come- regañó mi hermana
-La verdad nosotras queremos agradecerte Susan, por haberte fijado en el "Pilón" porqué ya lo dabamos para 'vestir santos'- dijo Lucy seria a lo que los demás rieron
...
-Duerman bien y no hagan mucho ruido- dijo mi hermana guiñando el ojo antes de cerrar la puerta de nuestra habitación, por fortuna Susan se estaba bañando así que no escuchó el desagradable comentario de mi hermana mayor
Tomé almohadas y una cobija de la cama mientras Susan salía del baño
-¿Qué haces?- preguntó cuando vió que ponía lo tomado en el piso
-Dormiré aquí- dije acostándome, la miré y me quedé con la boca abierta mentalmente, llevaba un camisón que le llegaba poco más arriba de la mitad del muslo
-Esta bien- dijo tratando de cubrirse más con la prenda que traía puesta. Se subió a la cama y apagó la luz
-Descansa- murmuró
-Igual tú- contesté mirando el techo con los brazos bajo mi cabeza
-Alessandro- me llamó
-¿Si?- contesté
-¿Por qué no duermes conmigo?-
Solté el aire retenido -por que... creo que aún no estamos listos para eso-
-¿Listos?- preguntó
-¿Recuerdas lo que te dije el día que me encontraste borracho en tu casa?-
-Me dijiste muchas cosas- dijo riendo
-Bueno de todas esas cosas yo sólo recuerdo una- aclaré mi garganta -yo deseo que tu primera vez sea conmigo, pero todo a su tiempo, y aún es muy pronto, y el día que suceda eso, tu y yo dormiremos juntos. ¿Esta bien?-
-Si- contestó en voz baja
-Ahora hay que dormir- dije para después cerrar mis ojos