mío;

736 117 34
                                    


La figura de Jackson estaba ahí bajo el umbral junto con su ineficiente asistente, quienes habían arribado. BamBam particularmente estaba hastiado de haber sido mandado en clase media, odiaba en esos instantes a su jefe dado que él se había dado el gusto de irse en primera clase, tampoco entendía la necesidad de venir a Alemania, bien lo puso hacer solo, no tenía por qué arrastrarlo, al menos pensaba eso, miro de reojo a su superior notando lo despejado y bien descansado que estaba, y su ser se inundó de una gran necesidad de ahorcarlo.

—Debes encontrarte con el cliente BamBam, si cometes un solo error considérate despedido y atrapado en este país.— el morocho alzó una ceja casi a punto de golpearle la nariz, sabía perfectamente cada una de esas intenciones, el mismo había invitado al cliente a este país.

Bien se pudo hacer cargo él y no llevarlo de corbata pero no, ahí estaba queriéndose matar pero más que nada a su superior, aunque debía de admitirlo su paga era realmente abrumadora y a veces Jackson tenía destellos de benevolencia así que realmente no era un mal jefe, pero había algo que no le convencía del todo acerca de él, oscuros secretos, lo más seguro. BamBam era demasiado entrometido y podría descubrir todo lo que quisiera con un poco de juego pero sólo se limitaba a matar el tiempo con su jefe para descubrir todo acerca de él, tampoco es que su superior fuera un tema caliente del cual podría hablar todo el rato con su amigo YoungJae por teléfono.

Pero ahí estaba descubriendo un secreto sin siquiera esperarlo, notó el ceño fruncido de Jackson, y como sus músculos se habían contraído al ver a un jovial chico de cabellos rubios riendo junto con un morocho que el mismo pudo describir como elegante.

Ahora sabía que su jefe si podría ser un tema caliente te cotilleo.

No tenía idea de que Jackson fuese homosexual, claro eso le venía importando una coronilla, el asunto se asomaba detrás de todo ello, era el más importante, sabía que su jefe era un cabrón pero nunca supo el nivel hasta ahora, al verlo dar grandes zancadas hacía el rubio alto.

—¡YUGYEOM!

Todos en el momento dieron un pequeño saltó, el delgado se quedó callado mirando la escena, tratando de entender toda la mierda que dañaría al rubio en cuanto supiese, sintió pena, pero no supo que hacer, tampoco quería perder su trabajo.

—¡AMOR!— saltó de un brincó YuGyeom a los brazos de su novio, estaba sorprendido y feliz pero algo en su pecho dio un pequeño golpe trayéndolo a la realidad, Jackson era su novio, JinYoung sólo era el chico que conoció en el viaje, su sonrisa se iba a borrar pero se forzó a sí mismo en conservarla, para acabarlo con un casto beso en sus labios.

Jackson se quedó un tanto inmóvil cuando recordó que BamBam estaba detrás suyo, y había visto todo, sabía que ese chico lengua larga diría todo de él.

El morocho se acercó con cierta arrogancia hacia los tres chicos, estaba realmente tentado a joder un rato a su jefe, acomodo su traje y se posó ante ellos.

—Gyeommie, él es BamBam mi imbe... —se detuvo a sí mismo y recordó que BamBam podría soltar algo a su rubio novio— Importantísimo asistente—se corrigió y el morocho sonrió complacido.

—Así que es el novio de mi jefe— sonrió extendiéndole la mano— no sabía que tuviese tan lindos gustos.

YuGyeom aún estaba un tanto anonado de ver a su novio frente de él sino también ver al chico delgado de buen porte, parecía un fashonista de primera categoría, muy distinto de él, así que solo logro sonrojarse que alguien así dijera algo de ese tipo, pero pronto cayó en cuenta, Jackson venía con el trabajo.

—Y bueno amor, ¿no vas a presentarme a tu ilustrarte acompañante?— JinYoung elevó una ceja casi queriéndose soltar a carcajadas podía verse desde lo lejos lo posesivo que era con el rubio, podía sentir su prepotencia, lo cual lo hacía sentirse molesto desde el inicio, sin siquiera conocerlo, aunque ciertamente ya lo hacía.

destino; pepigyeomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora