destino; pepigyeom

fiesta;

Las gotas de lluvia caían, era de noche, el avión estaba a punto de despegar, el ambiente se sentía triste y apagado, como si ya nada tuviese sentido alguno, la música que se reproducía en sus audífonos lo ponía de peor humor, las notas tristes y amargas, las letras, cada una embonando perfectamente con su sentir, así que quito de sus oídos esa melodía y se recostó en el asiento del avión, oyendo un poco de lo que hablaban los chicos frente a él:

—Ah eres un pequeño desgraciado, ¿Cómo le contaste de YoungJae? Aun no estaba listo para contarle eso, no como te lo conté a ti.

—Hyung, es mejor que se lo diga, no sea idiota, es un capítulo pasado sin importancia, esto reafirmara muchas cosas.

—Seguro— bufó mirando a la ventana el mayor, quién se sentía traicionado por el otro, ya que fue la persona quien le contó acerca del joven psicoanalista.

Jinyoung optó por ignorarlos y dormir en todo el viaje hacía New York, definitivamente sería mañana algo ajetreado, desde llegar al hotel y poner en marcha todo el plan, Mark seguramente ya estaría en la habitación del hotel, pensó de nuevo en YuGyeom, y se quedó dormido con la idea de ver sus ojos brillantes de nuevo.

La idea era simple y concisa, JinYoung y BamBam irían al evento, el mayor debía ignorar por completo a Jackson y a su acompañante para evitar levantar sospechas haciéndolo creer que no le importaba en lo absoluto, mientras los otros dos investigarían ese edificio, la policía era la última pieza de su rompecabezas siendo llamada cuando estuviesen en una especie de confrontación.

No era tan elaborado quizá pero realmente era algo podría funcionar, y sino en verdad no sabría qué hacer.

La cuidad de New York era todo un caso, brillante en todos los aspectos, lo podría jurar, el cielo cien por ciento despejado, no como en Corea, la cual siempre estaba contaminada. Tenía cierta belleza llena de edificios y apenas si recordaba cómo hablar el inglés, BamBam estaba siendo de mucha ayuda en ese momento porque JaeBum era un cero a la izquierda en el idioma.

Al llegar al hotel, lo primero que notó fueron varias caras conocidas, muchos de los que estaban ahí eran de empresas de otros países o eran sus propios rivales, le pareció ciertamente cómico que la mayoría de ellos se encontraran ahí, su mirada se paseó por el edificio, realmente era algo increíble de ver, la forma en que contrataban los colores, y la elegancia que desprendía, no le parecería extraño que el evento tratase de superar aquel hotel unas veinte veces más, todos se dirigieron a su habitación, porque si, no habían pretendido pedir tantos cuartos, sólo uno con dos camas, además si pretendían poner su plan en acción sólo se quedarían unas horas en el hotel, así que realmente no tenía chiste, al menos así lo pensó el pelinegro. Al abrir la puerta se encontraron con un Mark dormido en el sofá, la habitación era grande, no como en Berlín pero se podría decir que era grande y se notaba lo suficientemente cómoda en diferentes aspectos, desde los colores cálidos, hasta el suave calor que desprendía porque si, New York estaba siendo particularmente frío.

JaeBum se acercó de inmediato al sofá y como si fuese una obra de arte admiro al chico que estaba recostado ahí.

—Tenemos mucho que hacer— dijo BamBam— tenemos sólo unas horas para hacerte lucir despampanante.

— ¿Seguro eres heterosexual? —preguntó JinYoung en forma de broma haciendo gruñir al menor.

—Definitivamente, sólo tengo buen gusto, en fin deja esa mini maleta y nos largamos a hacerte lucir increíble.

Él mayor de ambos resopló y por diez segundos sintió más fácil la tarea de los otros dos, pero él era la imagen de su empresa así que no podría ser tan fácil.