CANDY & NEIL

CANDY & NEIL - PART- 1

LO QUE SIENTE NEIL LEAGAN....
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CAPITULO UNO:
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Candy había acudido a aquel llamado el cual supuestamente le había hecho su gran amor Terry...
Deseaba con ansias volver a verle y decirle tantas cosas, que su corazón se llenaba de dicha y de emoción, el tan solo pensar que se volvería a reencontrar con él.

Veía cada minuto en el reloj de su muñeca, no veía el momento en que el tren se detuviera para llegar a su destino, y finalmente el tren llegó a la estación....

Mientras caminaba por los senderos de un ligero bosquecillo, no dejaba de pensar en todos los sucesos que habian pasado con respecto a Terry y a ella. Siguió avanzando su camino en la penumbra de la luna, poco a poco se acercaba a la gran casa del lago.
Tenia un poco de nervios mientras entró al interior de la mansión. Cuando por fin abrió la puerta de la habitación, todo se encontraba oscuro y a media luz que reflejaba la luna a través de una gran ventana, hacia mucho frío en aquella habitación.

- Hola, hay alguien aqui ?.
- Terry, ya estoy aqui tal como me lo pediste...
- ¿ Será que aún no llega ? Pensó Candy mientras suspiraba de impaciencia...

Debió tener algún pequeño incidente para llegar hasta aqui ? Se interrogó para si misma, Candy...
La verdad, es que esta vieja mansión se encuentra a las afueras de la ciudad, pensó para si misma..

De pronto, en un rincón de la habitación, oyó salir una carcajada tan vanidosa, tan perversa, que ella no dudó ni un segundo en descubrir de quien se trataba, mientras una silueta se acercaba poco a poco a ella.

- Hola Candy, cómo has estado ?

Candy ensancha sus ojos verdes algo asombrada, pero mas aterrada que asombrada, pero tambien molesta, no lo podía creer !

- Neil, pero qué estás haciendo aqui ? Le preguntó bastante alterada...
- Verás Candy, te lo explicare...
- Te he citado aqui haciéndome pasar por el imbécil de Terry, por que estaba seguro que vendrías tratándose de él.
- Cómo pudiste engañarme ? ¡ Estás loco ! Exclamó furiosa Candy...
- Esto no te lo perdonaré jamás !
- Ahora si me disculpas, me retiro. No tengo mas nada que hacer en este lugar, terminó Candy

Cuando Candy se disponía a salir de la habitación, la mano de Neil la tomó por el brazo fuertemente, deteniendo su marcha...

- ¡ Espera Candy, no te vayas ! Exclamó alterado Neil...
- ¡ Suéltame Neil !
- ¡ Quítame tus manos de encima, te lo exijo !
- Candy, no te voy a soltar hasta que me digas que estas enamorada de mi, y que me quieres... Le exigió Neil
- ¡¡ Qué !! 
- ¡ Pero que rayos te pasa ! Exclamó sorprendida Candy... Ahhh, de veras que si te has vuelto loco !
- ¿ Cómo diablos me voy a enamorar de ti después de lo malo y cruel que has sido conmigo ?
- ¡ Después de todas las cosas malas que me han hecho tú, y tu hermana Eliza !

Al escuchar esas palabras, Neil sujetaba aun mas fuerte el brazo de Candy, que casi la estaba lastimando. Su ira lo estaba embargando seriamente...

- ¿ Lo amas verdad ?
- Amas a ese imbécil que te abandonó, y que ahora se va a casar con esa tal Susana, eh ?
- ¡ Lo das todo por ese inepto ! Exclamó con frustración Neil...
- ¿ Que si lo amo ? Se interrogó Candy...
- ¡ Por supuesto que lo amo !
- Porque el ha sido mi sol en medio de esta oscuridad...
- Pasarán mil años, pero yo nunca lo dejaré de amar, y en mi corazón no existe ni habrá nadie quien lo pueda reemplazar...
- Por esta razón, y muchas mas es que en mi corazón jamas habra un lugar para ti.
- ¡¡ Cállate !! Le gritó Neil, dándole al mismo tiempo, una gran bofetada, arrojando a Candy contra el suelo.

Al momento, Neil reacciona del acto tan vil y cobarde que acababa de hacer... Se había jurado a sí mismo no volver golpear a Candy... Pero lo que había hecho era inaceptable.

- ¡ Eres un estúpido Neil ! 
- ¿ Cómo te atreves a golpearme ?
- Eres el ser mas despreciable de este mundo, ¡¡ te odio !! Te odio con todas mis fuerzas. le gritaba Candy mientras se  levantaba del suelo y salia corriendo de aquella habitación.

Neil, después de aquellas palabras pronunciadas por Candy, observaba sus manos temblorosas.
Finalmente se desplomó en un sillón, y se sirve un trago de algún licor, mientras se hablaba a si mismo:

- ¡ Soy un ser despreciable !
- Asi como lo dijo ella , toddo este tiempo, pensando como un niño tonto siguiéndole los estúpidos juegos de Eliza, complaciendole sus malditos caprichos, sin darme cuenta del daño que le causaba en ella...
- ¡ maldita sea ! Exclamó furioso Neil, arrojando la copa contra la pared, donde se parte en varios pedazos
- ¿ Desde cuándo ?
- ¿ Cuándo empezó a nacer un sentimiento dentro de mi hacia ella ? Se interrogaba Neil con desesperación...
- ¡ Maldita seas Candy ! Maldijo Neil, mientras se empinaba la botella de licor...
- ¡ Porqué tenias que ser tú !

¡¡ CONTINUARÁ !!