CANDY & NEIL

CANDY & NEIL - PART- 23

LO QUE SIENTE NEIL LEAGAN
DEDICADO A FANS DE CANDY CANDY

CAPÍTULO 23...
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Eliza, cual víctima dirigiéndose a su verdugo, se acerca al abuelo Willian, y ni tan siquiera se atreve a mirarle a la cara.
El abuelo Willian, visiblemente molesto, alza su mano para abofetear a Eliza por su comportamiento.
Eliza simplemente aprieta los dientes, y espera temblando como una hoja, su justo y merecido castigo.
Y entonces...

- ¡ Alto ! Exclamó Candy interponiéndose entre el abuelo Willian y Eliza...
- ¡ Por favor papá ! No golpees a Eliza, le rogó Candy con determinación...

El abuelo Willian, sorprendido por la actitud de Candy, baja su mano, y finalmente le pregunta...

- Y bien, según tu.. ¿ Qué debo hacer entonces, hija ?

Candy se queda un rato pensativa, y finalmente responde...

- Es cierto que Eliza nunca se portó bien conmigo...
- Que me hizo la vida imposible, y que incluso me trató como algo despreciable...
- Pero... Pero no puedo culparle a ella por ello, pues ella fue criada influenciada en un ambiente egoísta, y a veces diría que incluso hostil...

El abuelo escucha con atención las palabras de Candy, y con sonrisa complacida le pregunta...

- y bien, según tu ¿ Cuál seria entonces el castigo por su actitud egoísta ?

Candy, ante esa cuestión, no sabe que responder, pues su noble corazón carece de malicia, y a pesar de haber pasado por malos momentos, ella no sabia lo que era el rencor.
Observó a Dorothy, y recordó las veces que Eliza abusaba de sus servicios, y como le miraba como si de un ser inferior fuese, así que se le ocurrió lo siguiente...

- Podríamos... Podríamos invertir los papeles por un tiempo...
- ¿ Eh ? Se interrogó el abuelo Willian...
- ¿ A qué te refieres hija ? Expicate por favor... Le rogó el abuelo Willian...
- Púes he pensado que el mejor castigo para ella, seria una cura de humildad...
- ¿ Una cura de humildad ? Se interroga el abuelo Willian... Interesante, prosigue hija...
- Pues ya que Eliza siempre miró de forma despectiva a los del servicio, entre los cuales yo me incluyo...
- Pensé que el mejor castigo, es que ella por un tiempo cambiase su rol... Es decir, que ella durante un tiempo fuese la sirvienta de Dorothy...

El abuelo Willian sonrió sorprendido ante esa propuesta, y miró de reojo a la madre de Eliza y a Dorothy, y finalmente contestó...

- Me parece una buena idea, hija...
- Será un buen castigo, y una buena cura de humildad para ella...
- Estoy orgulloso de ti, mi niña. Me demostraste tener un buen corazón, finalizó con orgullo el abuelo Willian...

Dicho esto, el abuelo Willian se sube al carruaje con Dorothy y Eliza, despidiéndose temporalmente de su hija Candy, la señora Leagan, y de su futuro yerno, el joven Neil Leagan.

Una vez solos, la señora Leagan pide por favor a Candy si puede hablar en privado con ella. Candy, sorprendida ante esa petición, acepta, y juntas se van caminando unos metros de la casa Pony, dejando al joven Neil perplejo, y algo preocupado, pues temía que su madre hiciese, o dijese algo ingrato a Candy.
La señora Pony sonrió, y acercándose a Neil, le dijo...

- Tranquilo, tu madre no es como piensas. Ella se dio cuenta de sus errores, y ahora seguramente a su manera, querrá disculparse con Candy por todo lo ocurrido.

Neil sonríe, y se queda mas tranquilo. Pero por otra parte, siente curiosidad por el pasado de su madre, y porqué parece que ella, y la señora Pony se llevan tan bien.
Así que finalmente, se arma de valor, y le pregunta a la señora Pony sobre la cuestión...