Después de que llegaran aquellos tipos, Richard me presentó y ellos de inmediato estuvieron de acuerdo. En el camino me estuvieron haciendo todo tipo de preguntas, nada fuera de lo normal, cosas como "¿Cúanto te pagó por venir?", "¿En serio te gusta Richard?", "¿Sabes guardar un secreto?".
Y así, el auto paró en un callejón, ellos se bajaron y me dijeron que cuidara, lo hice y fue entonces cuando descubrí lo que hacían. Ellos robaban, robaban bancos, casas, tiendas, etc. Fue increíble ver como sigilosamente entraban por el techo de aquella casa que, al parecer, sólo vivía una anciana. Luego de unos minutos, unos veinte quizá, escuché gritos y los vi salir corriendo mientras la anciana les gritaba desde la puerta con una raqueta en la mano: ¡Bandalos!, ¡Criminales!,¡Ya verán si los vuelvo a ver por aquí!.
Y mientras corrían hacia el auto uno de ellos de nombre Taylor me gritó: ¡Enciende el auto!.Lo hice rápidamente, ellos saltaron y yo pisé el acelerador. Jamás me había sentido tan genial, aunque yo no lo hubiera hecho la adrenalina me recorrió el cuerpo indicándome que había llegado mi trabajo deseado.
No lo pensé dos veces y les dije que me dejaran robar también. No fue nada fácil que aceptaran, tuvieron que pasar dos meses para que estuviera "lista", me la había pasado tomando clases extra de defensa personal, agilidad y busqué en Internet todo tipo de métodos para robar y salir limpia. Eran un poco extraños pero seguros.
Cuando ellos se aseguraron de que estuviera lista llegó el día, mi primer crimen lo iba a llevar acabo, mi equipo constaba de :Taylor, el líder. Richard, el rápido. Brad, el sigiloso. Eliot, el simple. Garret, el limpio y Yo.
Habíamos estado investigando una tienda de ropa, dijeron que era algo simple para principiantes, algo sin riesgo....., pero se equivocaron.-Escuchen, entraremos por el techo, Richard se asegurará de que no haya alarma y es ahí cuando todos entramos y bajamos hasta el suelo. Pónganse sus guantes y a robar todo lo que se les antoje.-dijo con una sonrisa picara y luego me miró-Y tú lindura, espero que sepas lo que haces, porque una vez que entras.....ya no sales.
Eso me hizo pensar y sentirme un poco mal, pensar en mi padre y en como iba a decepcionarlo de esta forma. Pero no tanto como para echarme para atrás.
-Sí estoy bien.-Bien ya es hora.
Mi corazón palpitaba, mi pecho subía y baja y mi mente estaba algo desconcentrada, esto tendría que ser épico.
Caminamos para estar en la parte de atrás y buscar la salida de emergencia, que sería por donde saldríamos. Luego activamos unas poleas para subir escalando, me temblaban las manos al momento de tomar la cuerda y luego ya estábamos ahí arriba, Richard hizo algo con la puerta del techo y asintió dándonos la señal.Abrío la puerta y bajamos dos metros hasta el suelo. El piso estaba frío todo estaba ocuro y saqué mi linterna, la tienda era inmensa, había ropa para niñas, niños, chicas y chicos.
Richard tomó una tanga y me la mostró-¡Hey!, apuesto que te quedarían muy bien.-rió y yo también.Fui directo a las blusas y pantalones, busqué mi talla y eche en la mochila todas las que me cupieron, pero no debía de exagerar, según Taylor, la mochila no debe de pesar para que al momento de huir, no fuera impedimento.
-Chicos, chicos, chicos......tenemos problemas.-dijo en susurro-No sé como pasó pero llegó la policía.Todos nos tensamos en el momento, más yo, por el miedo de ser detenida.
-Rápido salgan por el techo.-ordenó Taylor.-No, no, mejor por las escaleras, si son pocos lograremos golpearlos y salir.-Interrumpió Garret.
Todos corrimos hacia las escaleras y sin hacer ruido echamos un vistazo para descubrir que eran cinco policías que subían corriendo.
-¡Demonios!....Rápido, escondanse entre la ropa y cuando tengan tiempo salgan.-ordenó Taylor una vez más.
Yo busqué un lugar con mucha ropa y ahí me escondí, Garret se escondió unos metros más adelante, Richard se escondió entre unos peluches, Brad se puso en donde habían cientos de abrigos de señoras y Eliot entre un aparador.
Guardamos silencio y noté que mi respiración estaba muy agitada, estaba nerviosa, tenía que hacer silencio en ese momento.La puerta se abrió, los hombres traían linternas y cuidaban cada paso que daban, todos se cubrían la espalda.
Cuando menos lo esperé Taylor salió disparado hacía un oficial para propinarle un golpe en la cara que lo dejó inconsciente, luego de eso salió por la puerta y todos comenzaron a salir, yo no podía hasta que uno de los oficiales acercó su linterna a donde estaba.
Me puse más nerviosa y recordé que en mi bolsillo traía talco, que según servia para quitar las huellas, tome una cantidad considerable y la guardé en mi puño.
El oficial me tomó fuertemente de la camisa y me sacó de ahí a rastras, me levantó y me alumbró con su linterna, fue justo cuando reaccioné y le aventé el talco a los ojos, él me soltó al instante y grito:¡Mis ojos!.Yo corrí y justo antes de llegar a la puerta otro oficial me tomo de la mochila jalandome para atrás. Y recordé que en defensa personal me habían enseñado algo simple.
Junté fuerzas y le propiné un golpe el la mandíbula para después tomar su brazo y apretar un nervio que al instante lo dejó inconsciente.
Miré para otro lado y ya no había nadie, corrí.
Llegué al auto y todos me felicitaron.
-Vaya, ¡pensé que ya no saldrías de ahí!.-me dijo Richard.-Sorprendente, aún quedaban dos policías ahí adentro, no sé como saliste.-dijo Eliot.
A la mañana siguiente desperté tarde, era sábado. Cuando bajé a desayunar mi padre estaba leyendo el periódico mientras bebía una tasa de café.
-Hola papá.-dije y le di un beso en la mejilla mientras me dirigía a la cocina para sacar mayonesa, queso, etc. Y también prendí la tele-Hola linda, dormiste mucho.-dijo mientras dejaba el periódico en la mesa.
-Sí, estaba muy cansada, estudié mucho anoche.-dije y sentí el remordimiento en mis palabras. Debo aprender a no hacer eso, tengo que ser fuerte.
-Vaya, me alegra.
Me senté en la mesa a desayunar cuando......
"La noche de ayer fue robada la tienda "LOWELL", en dónde los ladrones escaparon y la policía quedó brutalmente apaleada, los informes dicen que no hay huellas pero que los ladrones eran unos chicos de entre 17-20 años, cuatro chicos y una chica....."
-Pero mira que desgracia-dijo mi padre antes de que pudiera cambiarle-Lo que hace la juventud de hoy para divertirse, que malditos.
YOU ARE READING
EN TINTA NEGRA.
General FictionSecuestros, robos, armas y droga. Todo eso, ¿mejor que estudiar leyes? Por supuesto. Arlett una chica de 24 años es tentada a dejar que su destino tiemble en la balanza de lo ilegal y lo legal. Su futuro es prometedor sin duda, pero ¿es acaso lo que...