Cuando necesitaba aire salía al jardín de la casa, era al único lugar tranquilo en donde podía estar.
Preferí tomar desayuno acá tranquilo, hoy no quería discutir, estaba cansado.
- No me esperaste para desayunar - su voz me sacó de mis pensamientos.
- Pensé que seguías durmiendo.
- ¿Vas a salir conmigo hoy? O ya no quieres.
- Lo que más quiero es salir de aquí, aunque sea vigilado - di un gran respiro.
- ¿Y si vamos por ahí? Para que salgas.
- Por ahí donde.
- Donde quieras ir. Sin estupideces eso sí - advirtió.
- Erick necesito un celular, desde que rompiste el mío no tengo uno.
- ¿Y por qué no me lo pediste antes?
- No lo sé.
- Tengo que recibir a alguien ahora ¿Te quedarás acá?
- Nunca me dejas acompañarte en tus asuntos, supongo que sí.
- Ven - tomó mi mano - no vas a escuchar nada que ya no sepas.
¿Seguía ebrio? Quizás le di lástima.
En lo que hablaba con su socio, me alejé un poco, no tanto ya que igual quería escuchar.
- Dime, cuál es ese negocio tan bueno que tienes.
- Erick, uno de los mejores y con muchos ceros - le entregó un cheque.
- ¡Vaya que sí! Cuéntame.
- Se quiere repartir una gran cantidad de droga en sectores que nunca hemos tocado - hizo una pausa para continuar - centros educacionales.
¿Qué? Eso era muy riesgoso, Erick no podía aceptar eso o se iba a hundir aún más.
- Eso es bastante peligroso ¿Lo sabes verdad? - al menos lo sabía.
- Pero a ti nunca te han descubierto, eres uno de los mejores haciendo negocios y podríamos ganar mucho - intentaba convencerlo.
- ¿Y quién la va a distribuir?
- Yo, solo necesito que te unas a nosotros, repartimos las ganancias en parte iguales.
- ¿Necesitas la respuesta ahora?
- Durante esta semana.
- Hagamos algo - se puso de pie - agrégale un cero más al monto, los porcentajes que queden sesenta para mí, cuarenta para ti y podría aceptar.
- Eso es mucho.
- Lo sé, pero el riesgo es bastante grande. Yo trabajo así y lo sabes, no ganaré lo mismo que tú.
- Está bien - terminó por ceder - esperaré tu respuesta entonces y te aviso cualquier cosa.
Lo acompañó hasta la salida, tenía que convencerlo de no hacer ese negocio.
- No lo hagas - dije de inmediato.
- Es un negocio grande, hay mucho dinero de por medio.
- Vas a tener problemas más serios con esto.
- ¿Problemas más serios? ¿De que hablas?
- Lo digo porque es riesgoso, tú mismo lo dijiste - traté de tapar mi imprudencia.
- Es bueno correr riesgos a veces.
- ¡Erick son niños!
- ¿Y que? Yo no los voy a obligar a consumir, yo solo haré el negocio - respondió.
- Ya tienes bastante dinero ¿Para que quieres más?
- Nunca es suficiente, además ahora somos dos en esta casa y tienes que tener de todo - negué con la cabeza - se nos hará tarde, vamos por tu celular.
Creo que tenía muchas ganas de gastar, compró lo que me hacía falta y muchas cosas que no.
Su ambición era grande, no era para nada de conformista, siempre quería más y más.
ESTÁS LEYENDO
Mi Perdición - Chriserick (Primera Parte)
Fanfic- Al menos tenemos algo en común - dije al verlo. Mis preferencias también estaban en los hombres - ya sé por dónde atacar - sonreí. -NO SE PERMITEN ADAPTACIONES-