Al otro día decidimos salir, obligadamente lo metí al cine ya que no quería.
Era una película de comedia, yo era muy exagerado para reírme y Erick de vez en cuando lo hacía, no le solté la mano en casi toda la película.
- Espera - me detuve en una joyería - me gusta esa cadenita.
Era sencilla en realidad, era la típica cadenita normal a diferencia que tenía como una especie de anillo.
- Que sean dos - le dije a la chica que estaba atendiendo.
- ¿Para que quieres dos?
- Porque quiero dos y ya.
Salimos de ahí ¿Enserio no se había dado cuenta que pedí una para él también? Qué ganas de golpearlo me daba a veces.
Apenas llegamos a la casa saqué las cadenitas de la bolsa de papel, lo llevé al patio ya que el día estaba lindo.
- Te ayudo - tomó la cadena y me la puso. Debo admitir que me sentí bien.
- Ven - abrí mis piernas para que se siente. Lo hizo dudoso ya que no acostumbramos a estar así - pensé que te darías cuenta que era una para cada uno.
- ¿Qué haces? - dijo al ver que le quería poner la cadenita.
- Al menos tengamos algo en común ¿Me dejas? - terminó por ceder.
Quería tener algo que me haga recordarlo cada vez lo vea, un recuerdo de todo esto.
Lo abracé de inmediato, estaba esperando a que me quite pero no lo hizo. Se acomodó un poco quedando recostado, cerró sus ojos y bastaron unos minutos para que se quedara dormido.
- ¿Erick? - lo moví un poco. Estaba completamente dormido.
Estiré un poco mi brazo para llegar al bolsillo de su pantalón y tomar su celular. Lo tenía bloqueado con su huella así que tomé su mano con cuidado. Abrí la cámara y tomé una foto lo más decente que pude, era un tierno durmiendo.
Puse la foto como imagen de bloqueo y dejé el celular a su lado.
Pasó cerca de una hora, yo estaba acariciándole la cara, sus facciones eran tan perfectas.
Abrió sus ojitos verdes de a poco, algo confundido.
- El que no dormía a esta hora - hablé.
- ¿Qué hora es?
- No lo sé, no tengo mi celular aquí.
Tomó el de él, se sentó de golpe al ver la foto - ¿Tomaste mi celular?
- Mmm...¿Si?
- ¿Lo revisaste?
- No, solo tomé la foto.
- Christopher Christopher Christopher - se volvió a recostar y bloqueó la pantalla sin quitar la foto.
- ¿Piensas que soy tu almohada?
- Me quito entonces - se iba a levantar pero no lo dejé.
- Era broma chiquitito.
- No me digas así, tengo nombre.
- El más lindo del mundo - besé su mejilla.
- No te aproveches tampoco.
- ¿Un beso?
- Ni lo pienses.
- Solo uno - intenté besarlo pero se corría.
- Déjame - me apartó la cara - no, Christopher.
Me subí encima de él para que me dé uno, recibí uno que otro golpe pero yo quería mi beso.
- Basta, déjame - se tapó la boca.
- Ya deja de comportarte cómo un niño - le quité las manos y pegué mis labios a los de él.
No sé si fue por lo que le dije o que, pero siguió el beso.
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Mi Perdición - Chriserick (Primera Parte)
Fanfiction- Al menos tenemos algo en común - dije al verlo. Mis preferencias también estaban en los hombres - ya sé por dónde atacar - sonreí. -NO SE PERMITEN ADAPTACIONES-