3| MY ONLY LOST ||teen wolf. [ᴍᴏᴅ]

6. Stand up and let it go.

Minutos. La respuesta de Stiles había sido minutos. Pues fue una verdadera mentira.

El sheriff Stilinski se levantó temprano como todas las mañanas. Le pareció raro que Stiles y sus amigos no estuvieran desayunando con él. Colocó café caliente en su vaso portátil y guió el paso al cuarto de su hijo.

—Chicos —abrió la puerta encontrando una escena casi cómica.

El cuello de Samantha no estaba para nada cómodo. Su cabeza caía del otro lado de la cama ni siquiera alcanzaba a tocar el suelo a excepción de sus brazos que cayeron al quedarse leyendo un artículo. Nunca se percató de que sus párpados no aguantarían tanto; Stiles estaba igual que ella. Solo que este tenía la mitad del cuerpo apoyado en el suelo y la otra en la cama. ¿Estaba incómodo? Por supuesto que sí, pero así como al resto le ganó completamente el sueño; por último, Scott permanecía en la silla móvil, en una posición también extraña. La impresora seguía haciendo su trabajo saliendo pilas y pilas de hojas. Todas con artículos periódicos sacados de la web.

—Es hora de levantarse —volvió a hablar Noah tranquilamente—. Chicos... —ni se inmutaron—. ¡Chicos!

Todos se sobresaltaron. Sam dio la cabeza contra el suelo, Scott casi se cayó de la silla giratoria y Stiles levantó la mirada rápidamente llevándose  consigo un papel que se adhirió a su mejilla.

—Debo ir a trabajar. Ustedes vayan a la escuela.

—Entendido cap —comentó Sam haciendo entredormida un gesto militar. Noah negó con la cabeza listo para irse pero Stiles lo interrumpió:

—¡Papá!... ¿Heather?

—No, aún no. —Ni bien cerró la puerta dando terminada la conversación, Stiles bufó.

—Diez horas y nada.

—Vamos a encontrar algo —aseguró Scott.

—Encontrar algo no hace que Erica esté menos muerta —repuso Stiles—. O que Boyd no esté menos a punto de morir.