Los Salvadores: "En busca de la utopía"

Capítulo 10

Bombay, India.

El maestro Tathagata Rao un anciano de 70 años muy respetado por toda la comunidad budista se encontraba meditando en uno de los templos más famosos de Bombay como solía hacerlo, ya no había gente en el templo pero el tenía permiso de estar ahí cuando el lo quisiera.

Cuando el maestro Rao meditaba se desconectaba completamente del mundo haciendo más fácil a Galaxis poder acercarse a él ya que su religión haría muy complicado que el llegará a entender que casi todo en lo que el creía era mentira.

Galaxis apareció en el templo y se acercó tan sigilosa como pudo hasta llegar a estar frente a el maestro Rao colocando la mano sobre el pecho de Tathagata haciéndolo ver cosas que cambiarán la forma en que vio la vida todo este tiempo.

Cuando Galaxis quitó su mano del pecho del maestro, el abrió los ojos y con un rostro de terror y decepción, observó meticuloso a la Diosa del universo sorprendido ante la presencia de tan mágico ser.

—Puedo entender que esto sea demasiado para usted maestro— le dijo Galaxis— Pero lo necesitamos para salvar a la humanidad y eso debería ser lo único importante.

El maestro Rao se quedó pensativo y sin moverse de la posición en la que se encontraba desde que Galaxis había llegado.

—Me gustaría decirle que tiene tiempo para poder procesar lo que está pasando pero estamos con el tiempo encima nuestro y tenemos que actuar cuanto antes.

—No es por faltarele el respeto que se merece, pero toda mi vida crecí creyendo en algo y en segundos me mostraste lo equivocado que estaba, no esperes que le de la espalda a mis creencias sólo porque me mostraste algunas cosas mágicamente... El mal se presenta de maneras tan extrañas ¿Como puedo saber que esta no es una de esas situaciones?

—Este mundo está regido por personas muy malas y necesitamos de su sabiduría para que ayude a estos chicos a erradicar la maldad y poder hacer de este mundo algo de lo que todos puedan sentirse orgulloso—comenzo a decirle Galaxis al maestro—. Prometo darte personalmente todas las respuestas que necesite pero necesitamos su ayuda en este momento, porfavor venga conmigo y si en algún momento decide regresar yo personalmente lo regresaré aquí a este bello templo.

Sin decir ninguna palabra el maestro Rao de puso de pie y Galaxis creo el portal por el cual entró, en espera del maestro, el pensó unos segundos antes de entrar pero al final lo hizo y entró al portal por el que Emily, Luka y Shaoran habían entrado antes.

El espacio.

En una esfera de energía se encontraban Emily Lawrence, Luka Petrov y Shaoran Liu las personas que ayudarían a los chicos a poder desarrollar mejor sus habilidades. Los tres estaban fascinados ante lo que veían sus ojos, un universo lleno de estrellas, un brillante sol a lo lejos y frente a ellos el Planeta Tierra tan majestuoso, en donde todos los humanos se encontraban sin saber que es lo que le deparará a el planeta.

El maestro y Terra aparecieron en un portal entrando en la burbuja en la que se encontraban, Galaxis creo otro portal y todos entraron en el.

Centro de la tierra.

Amaya estaba frente a Terra y ella colocó sus pulgares en la frente de Amaya para abrir su tercer ojo; en la colina comenzó a formarse un portal del que salieron Galaxis, Luka, Emily, Shaoran y el maestro Rao, los chicos se quedaron viendo a la hermosa Galaxis que bajaba lentamente de la colina.

Terra y Amaya no notaron la presencia de Galaxis y las personas que venían con ella. Las nubes comenzaron a tornarse obscuras dando vueltas arriba de los chicos; truenos comenzaban a formarse entre las nubes y enormes rayos comenzaron a caer por toda la pradera haciendo un estruendo impresionante.