My Boyfriend was a Boy (Levi x Eren) || Omegaverse || TERMINADA

• Episodio 1: ¿Es la única opción? •

En algún lugar del Distrito Stohess.

Al filo de la mañana, en una modernizada casa, la cocina fue cautivada con el dulce y suave aroma del té de limón.
Las delicadas manos de Eren preparan aquel dicho té, el cual llegó a las desarrolladas fosas nasales del omega.

Desde hace unas horas el azabache presentó malestares en la garganta, como a las 2 AM.
Eren, quien siempre ha sido atento con su pareja, decidió levantarse temprano para prepararle un delicioso té y un desayuno.

El castaño acomoda el plato y dos tazas sobre una bandeja, tomándola para luego subir a la habitación, donde el pelinegro reposa en su cama.

— ¿Puedo? —habló Eren detrás de la puerta semicerrada.

— Adelante.

— Te traje el desayuno —siguió, sonriendo.

— ¿Tan temprano? Ya me preguntaba en dónde estabas, y por qué levantado a estas horas...

— ¿Te sientes débil?

— Tch... ¿Por qué lo dices?

— Pues... No bajaste a buscarme, como usualmente haces.

Eren dejó la bandeja en la mesa junto a la cama, luego procedió a dar a su pareja su respectiva taza.

— Aún no, Eren, no te preocupes.

— Está bien —dijo dejando la taza nuevamente en la bandeja—, dejame tomarte la temperatura...

Levi accedió a los gestos de Eren, las manos frías del perruno se posaron sobre la frente del felino. Estaba tibio.

— Pues no tienes fiebre o algo así...

— Tch Eren, sólo es un dolor de garganta...

— ¡Hasta la voz ronca tienes!

Levi no respondió y desvió la mirada, Eren juntó sus manos y las escondió algo apenado, pensando que le molestaban sus acciones.

— Me preocupo por ti, ¿sabes? —murmuró con sus orejas abajo.

El felino comprendió entonces las cosas que hacia el castaño por él, decidió consolarlo.

— Eren...

El perruno volteó.

— Ven aquí...

Este apartó la sabana y extendió sus brazos y piernas, dándole espacio para que se sentara con él.
Eren sonrió e hizo lo que entendió, posándose entre las extremidades del mayor, a lo cual el contrario le abrazó con estas.

— Gracias... Ahora si puedes pasarme el té...

— ¡Con gusto! —dijo extendiendo su mano y alcanzando la taza— Toma, cuidado debe estar caliente...

— Está bien, —en cuanto tragó el sorbo que bebió, sintió como claramente ese líquido tibio viajaba por su garganta, calmando la leve comezón interior que tenía.

— Y... ¿Qué tal está? —cuestionó en voz baja.

— Está... ¿Es de limón?

— En efecto... ¿T-Te gusta?

— No, me gustas tú...

Eren al recibir esas palabras se sonrojó al 80%.
Ya que su Alpha no suele alargarlo así, el hecho de que lo haga es algo nuevo y hermoso cada día para él, esto le hizo mover su esponjosa cola constantemente y taparse el rostro con sus manos.

— ¡K-Kyaaa!

— ¿¡Eren!? ¿¡Qué pasa!? —dijo exaltado al ver sus manos cubriendo su rostro.